Fomentando atascos

Llevo varios meses oyendo, alucinado, en los informativos de Radio Euskadi una cuña titulada ‘La Diputación informa’, pagada por todos, en el que nos cantan día sí y día también las excelencias de la Súper-Sur, que agilizará las ‘necesidades’ (creadas) de ‘movilidad’ (vaya memez para llamar al tráfico de coches particulares) vizcaína. Algo parecido sucede en Madrid y otros lugares. Propaganda para crédulos. Nos quieren hacer creer que con esa estúpida autopista se acabó el problema pero es falso: es menos moderno. Es falso porque esta obra faraónica y aberrante sólo nos librará del tráfico de paso, que es muy poco: el mogollón se monta cuando los obcecados conductores de las afueras se meten en Bilbao o cerca. Y si encima lo nuevo es de pago, ni les cuento: los túneles de Artxanda son un fracaso, como la autopista de Bergara o las radiales en Madrid, demasiado caro para lo que ofrecen. La ‘fórmula mágica’ madrileña va por la M80 y no basta porque los constructores se han encargado de que quede saturada ya en el proyecto. El mismo error del acceso de la Avanzada al Txorierri: han metido un carril más y hay más atasco; y planean más carriles para que se forme más lejos pero tenga más anchura. Qué inteligencia más corta pero alguien se ‘forra’, seguro. Cuantas más vías, más tráfico, es automático; y cuantas más pegas, menos coches entrarán. La gente irracional no entiende otros mensajes más constructivos, está visto. El día sin coche ha de serlo a diario, uno suelto es hacer el paripé. Ahora el Gobierno Vasco, como otros, sale con un plan para reducir emisiones de efecto invernadero; si no diera rabia sería de risa. ¿Nos merecemos esto? Mejor transporte público ya.

 

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