Ley de Igualdad, ¿de qué?

El gobierno, con la Ley de Igualdad cuyo anteproyecto acaba de aprobar, desea instaurar la paridad entre hombres y mujeres en todos los ámbitos de la sociedad, y eliminar cualquier forma de discriminación por razón de sexo. Así pretende que haya el mismo número de hombres y mujeres en las listas electorales, en el gobierno, en los consejos de administración, en las cátedras universitarias etc. En cambio no aplica esa misma paridad a la célula más importante del tejido social, como es la familia, consintiendo que haya matrimonios formados solo por hombres o solo por mujeres. Tampoco parece que le guste mucho la educación diferenciada, puesto que no quiere concertar colegios solo de chicos o solo de chicas; pero en cambio no ve inconveniente en que haya familias formadas por dos padres y solo niños, o dos madres y solo niñas, a pesar de que la familia influye en la educación mucho más que cualquier colegio. Ya se ve que para nuestro gobierno, la paridad entre los dos sexos está bien siempre que no vaya en contra de sus postulados laicistas o de los intereses del "lobby" homosexual.