Preocupación social

No hay en este país ni en toda Europa institución que más labor social realice a favor de los desfavorecidos que la Iglesia Católica. Directamente y a través de las congregaciones religiosas y ONG's inspiradas por ella. Y la realiza tanto en el tercer mundo como en las grandes bolsas de pobreza que también existen en los países industrializados como España. La lista de instituciones como hospitales, leproserías, orfanatos, centros de atención para enfermos de SIDA, escuelas, comedores populares, además de miles de proyectos de desarrollo rural y comunitario en países paupérrimos, se haría interminable.

Y ahora nuestro gobierno pretende suprimir las subvenciones que otorgaba a la Iglesia Católica en virtud de un laicismo que podrá ser característico del partido que lo sustenta, pero que no es compartido por el pueblo español al que mayoritariamente le tiene sin cuidado y al que le preocupan otros problemas más reales.

Pero en cambio, sí continuará subvencionando un cine que no gusta y muy pocos van a ver, a unos sindicatos a los que casi nadie se apunta y a una televisión ruinosa cuya calidad es inversamente proporcional a su sectarismo. Ya es malo confundir Estado no confesional con laicista, laicismo con anticlericalismo, y pensar que los dineros públicos son del gobierno y que puede administrarlos con criterios partidistas. Lo peor, no obstante, es que suprimir esas ayudas a la Iglesia repercutirá negativamente en los más desfavorecidos. Y eso que se considera un gobierno con preocupación social.

 

Video del día

Feijóo ironiza con la última encuesta del CIS: "Cuanta más corrupción
en el PSOE, parece ser que más suben en las encuestas"
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato