La Semana Santa, ¿sólo vacaciones?
Dicen que los ajenos a la religión deberían trabajar en Semana Santa, Navidad, Reyes, y demás fiestas litúrgicas que jalonan nuestro calendario. Esta Semana no puede reducirse a unas mini-vacaciones para el disfrute de los sentidos, sino que su objetivo es dar al hombre un respiradero hacia lo sobrenatural y situarle en la realidad de las cosas como hijo de Dios y por tanto, heredero de su Paraíso.
No empequeñezcamos nuestro destino terreno y eterno: debe realmente merecer la pena si todo un Dios se exilió para vivir a nuestro lado y enseñarnos el camino del Cielo. Y si finalmente caemos en la tentación de apuntarnos a una oferta viajera de última hora, que no sea para dejar en el olvido que Dios, en estos días, morirá en una cruz para salvarnos del infierno.