La correcta educación lo es todo

Nuestros hijos viven demasiado bien, y con frecuencia ello es fuente de problemas. En una encuesta de la Fundación de Ayuda a la Drogadicción realizada a familias con hijos entre 14 y 20 años, el 20% de los padres reconocía sentirse desbordado por las exigencias económicas de sus hijos, a pesar de la gran cantidad de medios materiales y de dinero del que muchos de ellos disponen.   Somos incapaces de negarles nada para que no se sientan diferentes a los demás. El dinero es importante en la educación, y si no se utiliza adecuadamente será fuente de conflictos. Hay que tener claro que es un medio para cubrir necesidades auténticas, y no un fin en si mismo ni algo imprescindible para la realización personal o para ser feliz.   Si hacemos buen uso del mismo nos perfecciona y nos ayuda a ser más libres; mientras que la falta de sobriedad puede llegar a esclavizarnos. Los padres hemos de dar ejemplo, haciendo nuestros gastos con criterios de moderación y racionalidad. Y de manera especial antes de comprar algo a nuestros hijos nos hemos de preguntarnos si aquello les ayudará a ser mejores, o por el contrario les puede perjudicar como estudiantes, como ciudadanos o como personas.   Convendría que nos replanteáramos, sino es demasiado tarde, la conveniencia de la TV y el ordenador con Internet en la habitación, el móvil, las prendas deportivas de marca, la moto, y tantas cosas más. Bettina Sala Salla