Sin rubor en la cara
Las últimas palabras dichas en Ávila por Eta, pronunciadas en el único lenguaje de las bombas que entiende la banda, han sido interpretadas por Mikel Buesa como lo que "ETA está diciendo es que está dispuesta a seguir empleando la violencia para cumplir sus objetivos". Complementa su reflexión apuntando como "la banda terrorista está demostrando los términos en los que quiere negociar". Por otra parte desde el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) su portavoz, Enrique López, afirma que "la única solución que hay contra el terrorismo, como contra cualquier delito, es la aplicación estricta del Estado de Derecho". Nada difiere de lo que un porcentaje alto de la sociedad, piensa al respecto sin adscripciones políticas alguna, como son estos dos casos. Como no hay mas ciego que el que no quiere ver, Alfredo Pérez Rubalcaba, condenando el atentado de Eta, aprovecha para acusar al PP de intentar sacar "rédito partidista" de la lucha antiterrorista y de realizar una oposición "rencorosa y tremendista". La conciencia de actuaciones pasadas de su partido, le hacen pensar como el dicho aquel, del ladrón cree que todos son de su condición. Dios mío, si quién está contemplando el panorama es la sociedad entera, finalizando por los más perjudicados que son las Víctimas del Terrorismo. Sin rubor en la cara, vuelve a hablar en nombre de todos los españoles, que según él dicen, "están pidiendo a ETA que deje de matar". Manido, repetitivo y cansino mensaje. Lo que estamos diciendo muchos, entre ellos voces cualificadas no pertencencientes a partido alguno, es que se acabe con la banda por métodos policiales, judiciales, la ley de partidos y el pacto anti-terrorista. No sólo para que no maten, sino para que el crímen organizado deje de actuar en esta nación que la formamos todos los españoles.
