Vacuna o vacuno

Si la solución es vacunarse hasta lograr una inmunidad de rebaño, a lo mejor es para intentar acabar gestionando a todos como a una manada vacuna. ‘La izquierda volverá’ sueña el Presidente, después del trompazo de Madrid, por el que ha reconocido implícitamente que antes es necesario haberse marchado, para luego intentar volver. A lo mejor sueña en convertir a las personas en una manada de vacunos que siga fielmente al cabestro, con su tolón-tolón, aunque para que cumplan bien esa misión, a los cabestros hay que castrarlos, para que no alboroten demasiado a la manada, sino que la lleven al redil.

Castrar al presidente no parece que sea la mejor forma de dirigir al rebaño, si se trata de personas, aunque estas hayan sido vacunadas un 70 por ciento, lo que todavía falta. Parece que habría que contar más con ellas en los famosos 32 meses que le quedan. Aunque él tiene una tendencia insufrible a anticipar con un sobrado optimismo lo que vaya a suceder en esos 32 meses de Legislatura. Tal vez por eso presume una vez más de que todo está ‘a punto de relanzarse’, pero el plan que ha hecho, con un centenar de expertos, se titula ‘España 2050’, lo que sobrepasa ampliamente esos meses de gestión vacuna, e indica que tendrá que quedarse mucho más tiempo para cumplirlo, si le dejan. Estamos todavía en la maraña de las vacunas y los vacunos, que le vamos a hacer.