“99 Fancs”, una denunciad ácida del mundo publicitario, bate el record de taquilla

Más de medio millón de franceses han acudido ya a ver esta cínica confesión que es al mismo tiempo una crítica acerba del mundo publicitario, y que le valió a su autor el despido fulminante de la agencia de publicidad en la que trabajaba. Eso sí, pasó de la noche a la mañana de ser un publicitario desconocido, a ser un personaje más de la farándula, crítico literario, comentarista televisivo y autor de novelas.

La historia, más que una ficción, parece un documental que recrea en dos horas y sin piedad el ambiente que rodea a Octave, un joven publicitario que vive a base de cocaína y prostitutas y que un día siente como un suplicio la imposibilidad de imprimir un poco de creatividad y honestidad en la campaña que le encargan para vender un yogurt (por cierto, el director de la película, Jan Kounen, ha tenido que hacer encaje de bolillos para que el recipiente no se pareciera demasiado al de una conocida marca de lácteos y evitar así una más que posible denuncia).

Y, de paso, poniendo de manifesto cómo la sociedad de consumo es esclava de este sistema; cómo las jóvenes fotografiadas para vender la ropa de marca que portan acaban convirtiéndose en un objeto sexual; cómo los creadores tienen que plegarse a las exigencias del cliente que paga, incluídas sus inclinaciones de tintes racistas (aclarar la piel de la bella modelo de origen mediterráneo); cómo los publicitarios venden al ciudadano un mundo de ensueño que nunca alcanzarán.

 
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato