Papa Noel sustituye al Calvo
El enigmático actor inglés protagonista de la campaña de Lotería de Navidad, Clive Arrindell, ya no volverá a la tele. Después de varios años, el Organismo nacional de Loterías (LAE) ha decidido borrar de un plumazo a este personaje. Desde que este señor calvo anuncia el sorteo, las ventas se han incrementado anualmente entre un 6,5% y un 11,6%. Sobre gustos hay mucho escrito. El mítico calvo podría gustar más o menos. Podría caer más o menos simpático. La realidad es que se había convertido en un icono, en una marca emblemática estrechamente ligada a la Navidad de los españoles. Hace unos meses, después de invertir millones y millones en crear este personaje, el LAE decidió romper con Publicis, agencia creadora de este popular personaje. El disgusto ha sido mayúsculo al comprobar que el Calvo ha sido sustituido por un primer plano de las posaderas de un gordito Papá Noel -en presunta caída libre- con el siguiente texto: “¿Y si cae aquí?” desde el punto de vista creativo me parece que es un recurso más propio de un trainee primerizo que de profesionales. Cuando vi la campaña en una parada de autobús no podía creerlo y me froté los ojos. No estaba soñando. Allí estaba el cartel con el ‘gordito de rojo’ cayendo justo ahí, en la parada del bus. No sé con qué criterios se habrá dado luz verde a semejante desaguisado creativo. Perdón si molesto a alguien, pero me parece una tomadura de pelo en toda regla. Es decir: ¿Se ha enterrado al Calvo para resucitar a Papa Noel? ¿El LAE se ha fulminado toda una estrategia de años para sacarnos de la chistera al ‘gordito’ cayendo de las nubes? Una broma de muy mal gusto. Si yo estuviera en la piel de los que han aprobado semejante despropósito estaría preocupado. No sé si estos señores del LAE dormirán bien, pero como los resultados de ventas caigan seguro que rodarán cabezas. Entre otras cosas porque hay cosas que no tienen ni pies ni cabeza. Alguien lo terminará lamentando. Y mucho.
