“Ahora, a negociar”. La hoja de ruta del Gobierno sobre el final de ETA prevé la creación de una mesa de partidos para hablar de presos y de armas

El anuncio del jueves fue recibido con especial satisfacción entre los principales responsables de la lucha antiterrorista del ministerio del Interior: “Este comunicado es el bueno, el que queríamos”, aseguró un alto cargo a El Confidencial Digital.

Según ha podido saber ECD de altos responsables de la lucha antiterrorista, el Gobierno tiene perfectamente diseñada la hoja de ruta que habrá que seguir a partir de ahora. Es un plan meditado y consensuado entre el Ejecutivo central y el vasco, en la que ha participado en primera línea Alfredo Pérez Rubalcaba.

“Ahora, a negociar”

“Ahora, a negociar”, explican las fuentes consultadas por ECD. El primer paso, efectivamente, es crear una mesa de negociación, en la que no solo esté presente el Gobierno central. En ella también estarán incluidos todos los partidos del arco parlamentario, así como el resto de organizaciones de ámbito vasco.

Lo que busca el Ejecutivo es el mayor consenso posible en las decisiones que se puedan tomar.

Queda por ver, en primer lugar, la respuesta de ETA  a esa iniciativa. La información que tiene el Gobierno no aclara cuál será la postura de la banda terrorista, que en su comunicado únicamente hace referencia a un “diálogo directo” con España y Francia para solucionar el “conflicto”.

Además, hay que tener en cuenta que Francia ya ha dejado ver que no se fía del todo de las palabras del comunicado etarra y descarta cualquier reunión con España.

Desarme y presos

El plan que tiene diseñado el Gobierno socialista contempla dos cuestiones que serán las primeras a tratar:

-- Desarme. El Ejecutivo tiene como prioridad garantizar que ETA no vuelva a matar, y que no se produce una escisión de algunos descontentos, como ocurrió en el año 82. Para ello, una de las primeras medidas que se exigirá a la banda es que entreguen las armas, así como los dispositivos para poder fabricar bombas.

-- Presos. La situación de los más de 600 presos de ETA es otra de las prioridades para el Gobierno. Está descartada por completo una amnistía. Se trataría de buscar una solución razonable a los reclusos de España y Francia.

En la hoja de ruta del Gobierno ya figuraba que ETA iba a dar una respuesta positiva a la conferencia de paz de San Sebastián de esta semana. Fuentes de la lucha antiterrorista destacan un detalle: Martín Garitano acudió al acto con chaqueta y corbata, indumentaria que no utiliza ni siquiera en el día de San Ignacio, y que indica la importancia que dan a la convocatoria los dirigentes de Bildu.