Callos, platos de cuchara y marisco, el menú de veraneo de Mariano Rajoy en Ribadumia

Mariano Rajoy ya ha iniciado sus vacaciones. Tras comparecer en el Congreso por el caso Bárcenas, el presidente del Gobierno se encuentra disfrutando del verano en el Coto de Doñana. Dentro de unos días se trasladará a Ribadumia, una pequeña aldea de Pontevedra. Allí descansará en una casa rural que ha alquilado. Los vecinos ya están esperando su llegada.

El Confidencial Digital se ha puesto en contacto con varios comercios y restaurantes de Ribadumia para saber cómo esperan sus habitantes la llegada del presidente del Gobierno.

No es la primera vez que Rajoy veranea en este pequeño pueblo gallego. Las pasadas vacaciones de Navidad visitó la localidad durante unos días. Los vecinos ya están acostumbrados.

¿Dónde comerá?

El restaurante ‘O Tío Benito’ es uno de los preferidos de Mariano Rajoy. Los camareros han comentado a El Confidencial Digital que el presidente suele acercarse con su familia y amigos a comer. Una de las anécdotas que más recuerdan los trabajadores del local es la del presidente Rajoy y los callos.

Al parecer, los callos de ese restaurante gustan mucho a Rajoy. “¿Os quedan callos? Resérvame unos callos, por favor”, dijo una vez el presidente mientras se asomaba por la barra antes de pasar a la mesa.

‘Rosita’ y ‘El Tropezón’ son los otros dos restaurantes favoritos del jefe del Ejecutivo. Sus especialidades son la carne y los platos de cuchara.

“Campechano que no se deja ver mucho”

Los vecinos de Ribadumia lo describen como una persona tranquila y familiar. “Suele venir a comer acompañado de su familia o de algún amigo. Es muy agradable y campechano, sus hijos juegan con los míos. Es muy normal”, reconoce una camarera de ‘O Tío Benito’.

A pesar de esa cercanía del presidente, los habitantes de esta pequeña localidad admiten que no se deja ver mucho.

 

La casa donde pasarán Rajoy y su familia las vacaciones

Mariano Rajoy ha elegido ‘A Casa de Alicia’ como residencia de verano. El presidente ha alquilado para él y su familia una casa rural perteneciente al presidente del C.D. Ribadumia, un empresario local.

El alquiler de la casa rural es de 270 euros por noche. Se trata de una casa restaurada de piedra antigua y de dos plantas que consta de tres habitaciones y piscina para descansar. Se encuentra en lo alto de un monte, una zona bastante apartada y de poco tránsito.

No afecta demasiado al turismo

A pesar de la visita veraniega del presidente, Ribadumia es un pueblo que no recibe apenas turistas. La aldea consta de una población rural de unos cinco mil habitantes y tiene 700 personas aproximadamente desempleadas. “Hace 20 años este pueblo se dedicaba al ganado”, reconoce un camarero a este confidencial. “La visita del presidente nos da igual. No trae turismo. Este pueblo lo que necesita es trabajo”.

Ribadumia se encuentra lo suficientemente alejado de la costa como para atraer turismo de playa. “El único turismo que tenemos es porque venga alguien a ver la bodega”, comenta a ECD otro camarero de ‘Café-Bar a Serna’.

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