Carlos Dívar, tranquilo pero asombrado ante la denuncia de Gómez Benítez por malversación. En sectores judiciales se habla de una venganza del ‘sector Garzón’
"Es una venganza del sector Garzón". Así se analiza en sectores judiciales la denuncia por malversación contra Carlos Dívar, presidente del Consejo General del Poder Judicial, presentada ante la Fiscalía del Estado por José Manuel Gómez Benítez, vocal del consejo.
Fuentes del ámbito judicial consultadas por El Confidencial Digital, incluyendo sectores del CGPJ, explican que desde hacía unas semanas había circulado la especie de que el “sector Garzón” estaba preparando su venganza, y que el objetivo directo iba a ser Carlos Dívar.
El denunciante, José Manuel Gómez Benítez, nombrado en su día vocal del consejo por José Luis Rodríguez Zapatero, es amigo de Baltasar Garzón, y abogado suyo en los procesos abiertos contra él ante el Tribunal Supremo, a consecuencia de los cuales el magistrado estrella fue condenado a once años de inhabilitación por las escuchas que ordenó en el caso Gürtel.
Se ha quedado en una sola comisión
Gómez Benítez fue igualmente partidario de que el juez Javier Gómez Bermúdez fuera nombrado de nuevo presidente de la Sala Cuarta de lo Penal de la Audiencia Nacional, y defendió activamente su candidatura, pero el CGPJ optó por nombrar al ahora titular Fernando Grande-Marlaska, una decisión que no le complació.
Fuentes cercanas al Consejo del Poder Judicial relatan también que Gómez Benítez presentó, hace más de un mes, un plan de medidas de austeridad en el CGPJ, entre las cuales se proponía que los vocales ficharan cuando entraban y salían. A ese punto se negaron sus compañeros, solicitó que se votará la propuesta en bloque y fue rechazada.
Gómez Benítez abandonó todas las comisiones en el Consejo menos una.
Tranquilo pero asombrado
Carlos Dívar se encuentra tranquilo pero asombrado, según fuentes judiciales próximas al CGPJ. Tranquilo porque considera que los gastos personales los abonó y tiene las facturas, y también porque esos movimientos han sido visados por la Intervención General del Estado.
El asombro se relaciona con que es la primera vez que se produce una actuación de ese estilo, acudiendo directamente al Fiscal del Estado para acusar a un presidente del Consejo. El procedimiento lógico, precisamente ejerciendo su papel de control como vocal, tendría que haber sido haber planteado, en su caso, el asunto en la Comisión Presupuestaria del CGPJ, o a la Permanente. Gómez Benítez no comunicó nada ni al Pleno ni al Consejo.
Dívar viaja con frecuencia a Málaga porque tiene allí familia, y también para un tratamiento de espalda, además de para descansar, y se ha pagado el alojamiento cuando se ha tratado de asuntos no oficiales. La presencia o no de agentes de seguridad es una decisión del ministerio del Interior, aunque se recuerda que ha estado amenazado e incluso se han descubierto planes para atentar contra él.
Acceso a los expedientes
El CGPJ presidido por Carlos Dívar lleva aplicando desde 2010 una política de austeridad, sobre todo en los viajes de los vocales, que ha conseguido un ahorro de gasto del 30%, un millón de euros desde el año 2008 en que tomo posesión el actual consejo.
Además, se decidió permitir a los vocales acceder a los expedientes de gasto, algo que constituye una excepción en las altas instituciones del Estado, y que por ejemplo no ocurre en el Congreso de los Diputados. Así pudo Gómez Benítez ir recabando los datos que ha utilizado para su denuncia ante la Fiscalía del Estado.
