Congreso y Senado inician el último año de legislatura con una frenética tarea por delante: existen 80 leyes pendientes de tramitación
El Congreso y el Senado afrontan a partir de la próxima semana el último año de la legislatura con más de 40 leyes en tramitación y otras tantas que el Gobierno ha anunciado que presentará en el Parlamento durante 2007 para completar su programa político.
La intención del Gobierno es que salgan del Parlamento alrededor de 150 normas antes de que termine la legislatura, después de que en los tres primeros años, se hayan aprobado un total de 78 leyes, además de tres reformas de Estatutos de Autonomía -Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía-, según datos aportado por la Agencia EFE.
La modificación del Código Penal, la ley del Suelo, la de la Memoria Histórica, la del Libro o la reguladora del Estatuto orgánico del Ministerio Fiscal son algunos de los proyectos más representativos del Gobierno que hay en marcha en el Congreso.
En el Senado, afrontan la recta final de su tramitación el proyecto de ley de Universidades, el de igualdad entre hombres y mujeres o el del Estatuto básico del Empleado Público.
De entre las normas que el PSOE pretende impulsar de inmediato después de varios meses estancadas está la ley de cesión del Castillo de Montjuic o la reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional (TC). La relativa al TC es la que más tiempo lleva en espera -llegó al Congreso en noviembre de 2005-, motivado por el empeño del PSOE en sacarla adelante con el consenso del PP por su relevancia institucional.
Entre los 40 proyectos legislativos que el Gobierno ha anunciado que aprobará en los próximos meses destacan la Ley del Cine, la de prevención del Alcohol entre menores y la de Adopciones internacionales.
Algunos ya han sido aprobados por el Consejo de Ministros en enero, como el proyecto de ley Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera y el de protección a los animales de producción o para fines científicos.
El último año de actividad parlamentaria se verá condicionado por las elecciones autonómicas y municipales que se celebrarán a finales de mayo. Estas elecciones serán la antesala de las generales de 2008, convocatoria por la que el Congreso y el Senado se disolverán el próximo mes de enero, si se mantienen los plazos previstos.
