Si la Diputación de Álava no pasa al PP antes de Navidad, el cambio se convertirá en imposible porque en 2010 se vuelve a entrar en tiempo electoral
La posibilidad de que la Diputación de Álava deje de estar presidida por el PNV, para pasar a manos del Partido Popular, se convertirá en prácticamente irrealizable si se llega a Navidad y el cambio aún no se ha producido.
Fuentes políticas cercanas al PP explican que ese movimiento tiene como plazo límite las próximas Navidades, y que si para entonces no se ha producido ya hay que darlo por imposible. De ahí el nerviosismo que se aprecia algunos dirigentes en el País Vasco, que ya han empezado a hablar.
La explicación que ofrecen es que, una vez pasadas las fiestas de fin de año, se entra en un 2010 que es ya tiempo electoral, porque quedará menos de año y medio para las siguientes elecciones municipales y autonómicas, a celebrar en 2011.
Aunque no corresponda convocarlas en el País Vasco, sin embargo las circunstancias generales harán que PP y PSOE tengan que visualizar mucho más el enfrentamiento político para preparar la campaña.
