Los consejos de ERC al BNG si entra en la Xunta: resolver disputas internas y mucho cuidado con la “doble cara” del PSdeG

El BNG tiene ante sí una oportunidad histórica de solventar sus malos resultados, con un pacto con Touriño que diluiría la pérdida de peso de los nacionalistas. Este es el convencimiento que existe en el entorno de Esquerra Republicana tras el 19-J. Pero advierten: “Anxo Quintana debe ir con cuidado para que sus consejeros no queden diluidos en un gobierno que el PSdeG intentará capitalizar al máximo”.

El partido que lideran Carod Rovira y Puigcercós algo sabe de gobiernos en coalición con el Partido Socialista. De ahí el interés que puede tener la valoración que realice la formación nacionalista sobre el futuro que espera a Galicia si se confirma la pérdida de la mayoría absoluta por parte del PP.

El primer análisis que se hace sobre los comicios gallegos desde ERC es sobre la delicada situación que atraviesa la propia formación gallega. El relevo generacional de las cabezas visibles del BNG, escenificado especialmente el cambio de su líder histórico, Xosé Manuel Beiras por el senador Anxo Quintana, de 49 años, ha sido digerido con dificultad a nivel interno.

Esta situación de teórica debilidad coyuntural, explican desde Esquerra, la detectó enseguida el Partido Popular en Madrid que habría presionado a Fraga –aseguran- para que adelantara las elecciones, previstas para octubre, con la esperanza de aprovechar la debilidad de los nacionalistas, que protagonizaron algunos enfrentamientos internos que trascendieron de puertas afueras.

Ahora, para los hombres de Puigcercós el BNG debe aprovechar la posibilidad de remediar sus malos resultados, mediante un pacto con Touriño y un gobierno de coalición que disimularía –dicen- la pérdida de peso de los nacionalistas.

“Pero hace falta ir con cuidado”, precisan los catalanes de Esquerra. “Todo tiene un precio y Anxo Quintana tendrá que medir muy bien este pacto para que sus hipotéticos consejeros no queden diluidos en un Gobierno que probablemente el PSdeG intentará capitalizar al máximo para esconder estos acuerdos que tantas susceptibilidades generan entre los barones del PSOE y los sectores más españolistas y antinacionalistas del Partido Socialista”.

Desde ERC se lanza una última advertencia: el BNG debe extraer una lección de la experiencia de otros pactos en Galicia con el PSdeG. Los socialistas han sido muy desleales, recuerdan, en la mayoría de los gobiernos municipales en qué están gobernante con el BNG. “Cuando el PSdeG tiene la alcaldía –insisten desde Cataluña-, su comportamiento es muy diferente a cuando está en manos del BNG. Y esta doble cara y manera de hacer de los socialistas es la que da miedo a muchos nacionalistas ante un posible pacto de Gobierno”.