Crisis de Gobierno. El PP cree que ZP le ha hecho un guiño a las TV con la salida de Carmen Calvo y desde Cataluña insisten: Carme Chacón es ‘un puente’

El golpe de efecto de Zapatero del pasado viernes, tras anunciar un cambio en cuatro carteras de su Gobierno, ofrece lecturas singulares en el PP y los nacionalistas catalanes. En Génova ven un guiño a las televisiones, a unos meses de las elecciones, y los nacionalistas catalanes, un intento del presidente por recuperar allí la confianza perdida.

Según han reconocido a El Confidencial Digital algunos dirigentes catalanes, el movimiento de Zapatero con el nombramiento de Carme Chacón como ministra de Vivienda pretende meterla en la carrera electoral, que todos los grupos políticos ya dan por iniciada.

Por otro lado, consideran que esta decisión es una clara declaración de intenciones del presidente por  acercarse a Cataluña y recuperar la confianza perdida, que todos los partidos catalanes evidenciaron la semana pasada en el Congreso con el actual Ejecutivo por “el incumplimiento” de algunas de sus prerrogativas, como el desarrollo del Estatuto catalán.

Desde luego, aseguran estas fuentes, Chacón es considera como la persona idónea para construir un nuevo puente con Cataluña. Se basan precisamente en su trayectoria política. En junio de 1999 ya fue concejal del Ayuntamiento de Esplugues de Llobregat y primer teniente de alcalde de Servicios Económicos, Recursos Humanos y Seguridad Ciudadana hasta 2003.

Entonces, fue nombrada portavoz del PSOE y del Comité Electoral para los comicios del 14 de marzo de 2004, en los que ocupó el número dos en la lista del PSC por Barcelona. Su trayectoria parlamentaria se había iniciado en marzo de 2000, cuando consiguió el acta de diputada por la capital condal. En esa legislatura fue vocal de la Diputación Permanente y la Comisión de Educación, Cultura y Deporte, y estaba adscrita a la Comisión de Infraestructuras.

De hecho, subrayan las mismas fuentes, en los últimos días, Chacón había dejado claro que asistía con plena satisfacción a la aprobación, por parte del presidente del Gobierno, de las transferencias del tren de Cercanías y, aseguró convencida, que no sería el último gesto de Zapatero en su intención de desplegar el Estatuto de Autonomía.

Por el contrario, para algunos dirigentes del Partido Popular consultados por ECD, con estos cambios Zapatero les ha dado la razón en cuanto a que no todo en su gobierno va tan bien y es tan bonito como “vendió”, con aquella larga lista de cifras que llenó su primer discurso del debate del Estado de la nación.

Además, explican, se ha quitado de en medio a la ministra de Cultura, Carmen Calvo, por el grave error que ha cometido con la Ley del Cine. Destituyéndola, entienden en Génova, ha lanzado un guiño a las televisiones para que, de aquí a las elecciones generales, no se porten demasiado mal con su partido.

Si de verdad, advierten los ‘populares’, hubiera querido realizar cambios para cumplir sus compromisos electorales, como se ha sugerido, se hubiera quitado de en medio al ministro de Justicia que no ha cumplido ninguno de los encargos. Más bien al contrario: los ha ampliado, como lo demuestra la reforma de la Carrera fiscal, donde ha dado muestras de una gran negligencia.

 

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