Movimientos para evitar una guerra civil en el PSOE
El asturiano Javier Fernández está manteniendo contactos discretos con cargos del partido para que el Comité Federal no se convierta en un plebiscito a Pedro Sánchez
Pedro Sánchez afronta, el próximo sábado, el Comité Federal más decisivo desde que es secretario general del PSOE. Con la incertidumbre de no saber si Felipe VI le propondrá como candidato a La Moncloa, deberá hacer frente a la oposición de Susana Díaz y otros cargos a un gobierno de coalición con Podemos. No obstante, otros dirigentes se están moviendo para evitar una guerra civil.
Según explican a El Confidencial Digital dirigentes del PSOE muy próximos a Ferraz, Pedro Sánchez lleva, desde el pasado viernes, en contacto permanente con algunos líderes autonómicos del partido. El objetivo de esas conversaciones es testar su opinión sobre un posible acuerdo con Podemos para llegar a La Moncloa.
La postura de la mayoría de barones es que el partido no debe cerrarse a una coalición con Pablo Iglesias o los suyos. No obstante, sostienen que ese sería “el último escenario a plantear”.
Susana Díaz, por su parte, se niega tajantemente a ese acuerdo. Y se aferra a la oposición de Felipe González, José Bono, y más representantes de la vieja guardia socialista, además de a la amenaza de un referéndum independentista planteado por Podemos, para alzar la voz en el Comité Federal.
Javier Fernández, el pacificador
Consciente de esta postura de la andaluza y de dirigentes históricos del partido, Pedro Sánchez ha buscado apoyos entre los barones regionales más afines. De hecho, el pasado lunes recibió en Ferraz al murciano Rafael González Tovar, que reivindicó el liderazgo del madrileño de cara al Comité Federal. Un mensaje que, en los próximos días, repetirán, entre otros, la madrileña Sara Hernández y el catalán Miquel Iceta.
No obstante, el secretario general sabe que esas voces favorables no son suficientes, y por eso ha pedido ayuda a uno de los máximos referentes del PSOE actual: Javier Fernández. El presidente asturiano, que en su día apoyó a Madina frente a Sánchez, ha mantenido siempre una postura dialogante con Ferraz, y ya ha calmado, en otras ocasiones, los ánimos de los barones más críticos.
Según explican a ECD dirigentes del PSOE muy próximos al presidente del Principado, Fernández ha transmitido a Sánchez que no habrá un “golpe de Estado” contra el actual secretario general el próximo sábado. Es más, le ha asegurado que él mismo está pidiendo a otros líderes autonómicos que eviten escenas de confrontación en el Comité Federal.
En ese sentido, estas mismas fuentes recuerdan que el asturiano ya fue el impulsor de una cumbre de barones, previa al Consejo de Política Federal celebrada en julio, en la que todos los dirigentes pidieron a Susana Díaz que cesara en sus ataques contra Pedro Sánchez para no dañar al candidato a las generales.
Sánchez buscará un acuerdo antes del sábado
El compromiso del presidente asturiano ha tranquilizado, en parte, a Pedro Sánchez. No obstante, el secretario general también tomará la iniciativa para evitar cualquier tipo de deserción en el Comité Federal del PSOE.
En concreto, el madrileño tiene pensado organizar un encuentro previo con todos sus barones para consensuar con ellos un mensaje común y las líneas rojas para sellar un pacto de gobierno con Podemos y Ciudadanos.
Sánchez aspira a lograr lo que consiguió en el anterior Comité Federal, cuando sentó a cenar a todos los barones la noche antes del cónclave y selló con ellos un acuerdo sobre la política de alianzas del partido.
Ahora, no obstante, la situación es más delicada, ya que sobre la mesa hay una oferta de gobierno de coalición con Podemos que rechazan, entre otros, Felipe González, Susana Díaz y José Bono. Pese a ello, desde Ferraz apuestan por que “la opinión de la mayoría se imponga a la de unos pocos”.
El calendario juega a favor del secretario general
El escenario, sin embargo, podía haber sido peor para Pedro Sánchez si Felipe VI le hubiera convocado el viernes en Zarzuela para proponerle formar gobierno. De esa forma, el secretario general se hubiese encontrado en la tesitura de aceptar la oferta sin consultar al Comité Federal o rechazarla y tirar por tierra sus opciones de llegar a La Moncloa.
Ahora, sostienen en Ferraz, el calendario juega a favor del secretario general, que pretende salir del cónclave del sábado con una postura clara que notificará al rey en la reunión que ambos tendrán el martes. Y, si el monarca le ofrece formar gobierno, “no rehusaremos como hizo la semana pasada Mariano Rajoy”.
