Relevo de Ruiz Gallardón

Sectores del PP critican a Rajoy por haber nombrado a un tecnócrata para Justicia

Lanzan el mensaje de que se ha perdido otra oportunidad para nombrar a un político de peso para dirigir este ministerio

Nueva oportunidad perdida. Esta es la sensación que existe en parte del Gobierno y del PP después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, decidiera el martes nombrar a otro tecnócrata, Rafael Catalá, como nuevo ministro de Justicia en sustitución de Alberto Ruiz Gallardón.

“Necesitamos un gobierno con más carga política. Es el momento de más política y hubiese sido bueno que el presidente se hubiera decantado por un nombre de más peso político para sustituir a Gallardón”.

Así habla un alto cargo del Gobierno de la decisión de Mariano Rajoy de confiar la cartera de Justicia a Rafael Catalá, ex secretario de Estado de Infraestructuras. Catalá, madrileño de 53 años, está considerado por la gran mayoría un buen gestor, otro tecnócrata del gusto de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, pero su peso político es mínimo.

“Ha vuelto a repetir la jugada que hizo con el nombramiento de Isabel Tejerina en Agricultura en sustitución de Miguel Arias Cañete. Y la reflexión es la misma: Tejerina es una buena gestora, lo hará bien, pero su fuerza política no tiene nada que ver con la de Cañete”, explican estas fuentes.

Un diputado del PP insiste en la idea. “Catalá ya estuvo en Justicia y ya estuvo a las órdenes de Rajoy. Lo va a hacer bien y es de la máxima confianza del presidente. Pero no es un peso pesado político del partido que pueda ayudar a ganar votos o a recuperar al electorado perdido”.

Vieja crítica

Estas ideas forman parte de una vieja crítica que han trasladado al presidente el grupo de ministros amigo de Rajoy, el llamado G-5. Formado por José Manuel García MargalloAna Pastor, Jorge FernándezJosé Manuel Soria Miguel Arias Cañete, los cinco son amigos personales de Rajoy.

Como ha publicado este confidencial, los cinco ministros (Cañete está ahora en Europa) trasmitieron en marzo al presidente Rajoy el mensaje de que la vicepresidenta había impulsado a los tecnócratas en todas las áreas de administración, aparcando la política.

Como explicó también este confidencial, Rajoy ha defendido en todo momento a su mano derecha frente a estos movimientos del G5. “Y los últimos nombramientos vienen a confirmar que efectivamente Rajoy prefiere a los tecnócratas frente a políticos de más peso que existen en el partido y que están en el banquillo”, explican fuentes populares.

 

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