La cúpula del PSOE avala el viaje de Felipe González a Irán: “es positivo exprimir todas las vías diplomáticas para reconducir la crisis”

El ex presidente del Gobierno Felipe González concluyó el pasado jueves la visita privada a Irán que dio inicio el 28 de agosto y durante la cual se reunió con el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, el negociador iraní para el programa nuclear, Alí Larijani, y el ministro de Exteriores, Manoucher Mottaki.   La versión oficial que circuló en medios políticos días atrás aseguraba que González acudió al país persa invitado por el Ministerio de Asuntos Exteriores en calidad de ex presidente del Ejecutivo español. En la sede nacional del PSOE son incluso más explícitos y no ocultan que el desplazamiento de Felipe González a Irán contó con la aquiescencia de la cúpula del partido.   En Ferraz explican cómo Felipe González es reclamado, con cierta frecuencia, como interlocutor-mediador. De hecho, añaden a modo de ejemplo, en estos momentos está sobre la mesa la propuesta de Kofi Annan de nombrarle su representante personal en el Congo.   Volviendo a Irán, el PSOE avaló el viaje –aseguran a El Confidencial Digital desde el partido - considerando que es positivo exprimir todas las vías diplomáticas para intentar reconducir la crisis con Irán. La posición del PSOE en este tema es la que defiende la ONU y la Unión Europea –añaden-: presionar diplomáticamente a Irán para que someta su programa nuclear al control de la Agencia Internacional de la Energía Atómica. De esta manera, se garantizaría que el programa es exclusivamente para fines civiles y no militares.   El PSOE apuesta por la diplomacia dirigida por la UE y la ONU como el mejor camino para resolver la crisis, remachan desde la sede nacional del partido.