El PSOE de Rubalcaba descarta celebrar primarias ‘a la francesa’ para elegir al candidato a presidente del Gobierno: no participarán los simpatizantes para impedir votos manipulados por intrusos
La actual ejecutiva del PSOE está encontrando problemas a la hora de definir el proceso de elecciones primarias para elegir al próximo candidato al presidente del Gobierno. Carme Chacón, previsible rival de Rubalcaba, apuesta por el modelo francés abierto a todos los simpatizantes, pero en Ferraz temen la existencia de "votos manipulados por personas ajenas al partido".
Según explica a El Confidencial Digital un miembro de la cúpula del PSOE, “nosotros apostamos por primarias a la francesa, pero sólo hasta la militancia de base, y quizá con un número representativo de simpatizantes, para evitar la excesiva influencia de intrusos o grupos de presión dentro del proceso”.
Ese razonamiento, compartido por el equipo más cercano a Alfredo Pérez Rubalcaba, irá incluido en la ponencia marco que realizará Óscar López de cara a la Conferencia de Organización del partido que se celebrará en otoño, y en la que se decidirá el procedimiento específico para elegir al próximo candidato socialista a la presidencia del Gobierno.
Las fuentes consultadas por este diario explican que, en estos momentos, “el Secretario de Organización está formando a los grupos de trabajo de cara a esa cita, aunque todavía no se ha empezado a redactar el texto que presentará en septiembre u octubre”.
Los comités regionales podrán presentar enmiendas
La propuesta de dejar fuera a todos los simpatizantes, o incluir a una pequeñísima parte de votantes del PSOE que no sean ‘sospechosos’ de ser ‘intrusos’ en las elecciones primarias –se habla de aceptar a una “representación” de esas personas- puede ser enmendada por los comités regionales del partido, convocados para la Conferencia de Organización.
Dirigentes socialistas que apoyaron a Carme Chacón en el Congreso de Sevilla aseguran a este diario que, “de no aprobarse un sistema de primarias cien por cien a la francesa, comités como el de Andalucía, Madrid o Cataluña pedirán importantes cambios en la ponencia marco”.
Miedo a “grupos de presión externos”
Desde Ferraz aseguran que “el inconveniente de instaurar un proceso de primarias totalmente abierto es que personas o grupos totalmente ajenos y contrarios al partido, pueden manipular las votaciones con objetivo de hacernos daño”.
Esos agentes externos, “como partidos de extrema derecha o grupos de presión tipo ‘Manos Limpias’ o el 15-M”, pondrían convertir el proceso “en un problema más que en una solución”, por lo que “tenemos que tener claro quiénes son las personas a las que vamos a abrir nuestras puertas para que puedan votar”.
