Rajoy quiere irse ‘tranquilo’ a Sanxenxo y no tener que volver con urgencia a Moncloa como le pasó a Zapatero: está pidiendo informes que le garanticen la estabilidad del país mientras esté fuera de Madrid
Rajoy está diseñando varias escapadas a Sanxenxo para mediados de agosto. Pero el presidente quiere dejarlo todo atado, y que ningún sobresalto le obligue a regresar precipitadamente a Moncloa como le ocurrió a Zapatero el año pasado. Está pidiendo informes a sus ministros económicos y asesores que le garanticen la estabilidad del país en esas fechas.
Según ha sabido El Confidencial Digital, la mujer del presidente, Elvira Fernández, y sus dos hijos, Mariano y Juan, si pasarán la mayor parte del mes de agosto en Sanxenxo y él acudirá a visitarlos en días sueltos.
Durante años, Rajoy nunca ha faltado ningún verano a su tradicional descanso en la provincia de Pontevedra, bien a Sanxenxo, donde además conoció a su esposa, pero también en Ribadumia, donde cada año a principios de septiembre inauguraba el curso político con destacados dirigentes del PP gallego.
Quedarse en Moncloa si el temporal no amaina
Rajoy quiere tenerlas todas consigo. Incluso, ha comentado a su entorno más cercano que está dispuesto a no abandonar la Moncloa si la situación económica del país se agravara conforme avancen los días.
Y ese el motivo, según las fuentes consultadas, por el que está consultando a sus ministros económicos y expertos de máxima confianza sobre cuál va a ser la evolución de la economía española y de la prima de riesgo en las próximas semanas.
De momento, Rajoy viajará a Palma de Mallorca el 14 de agosto para el tradicional despacho estival con el rey en el Palacio de Marivent. Además, ha convocado Consejos de Ministros para el día 3 y el 24 de agosto, y otro más, seguramente, en la semana del 8 al 15, que todavía está sin concretar.
Evitar tener que volver con urgencia a Madrid
En la actual situación económica, el equipo de Rajoy va a tratar de dar imagen de que el presidente está al pie del cañón para que no se repitan escenas como la del pasado verano cuando el entonces presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero tuvo que regresar precipitadamente de sus vacaciones en Doñana al dispararse la prima de riesgo de España.
También a Rajoy, que entonces era líder de la oposición, le llovieron las críticas por estar desaparecido en el mes de agosto. El dirigente popular se encontraba en Sanxenxo, donde alternó sus jornadas de descanso con apariciones públicas en la Plaza de Toros de Pontevedra o en la Festa do Polbo do Carballiño.
