Zapatero se propone aprovechar el desastre en Cataluña para hacer limpia en el PSC. Montilla no hizo caso al aviso de Ferraz sobre su equivocada estrategia
El presidente nunca vio con buenos ojos un segundo tripartito y quiere dejar fuera del PSC a todos aquellos que lo impulsaron. Montilla ha adelantado la ‘revolución’: la intención de Ferraz era iniciar una nueva etapa después de las elecciones municipales.
Según ha podido saber El Confidencial Digital¸ la dirección del PSOE ya avisó a los socialistas catalanes del desastre que supondría un nuevo gobierno de coalición con los nacionalistas. Los resultados del 28-N han dado la razón a Ferraz y Zapatero ha ordenado que se haga una “limpieza a fondo” en el PSC para empezar de cero.
Voces autorizadas del PSOE explican los mensajes que Montilla recibió desde Madrid antes de formar Gobierno en 2006: “Le aconsejamos que no volviera a pactar con Esquerra e Iniciativa porque, hiciera lo que hiciera su Gobierno, sólo trascenderían los mensajes soberanistas dirigidos por sus socios. Él prefirió convertirse en presidente de la Generalitat y ahora el PSC ha obtenido los peores resultados de su historia”.
Las mismas fuentes, consultadas por ECD, añaden: “Montilla se ha dado cuenta de esto muy tarde: ha intentado recular los meses antes de la convocatoria electoral pero ya no había nada que hacer. Ahora hay que empezar una nueva etapa con nuevos rostros que tengan una línea ideológica clara y no den bandazos”.
Desde la dirección del PSOE tienen claro que el PSC necesita una reestructuración urgente, pero ésta no podrá darse hasta después de celebrarse las elecciones municipales de 2011. No obstante, la decisión de Montilla de renunciar a su escaño en el Parlamento catalán y a ser el líder de la oposición podrían acelerar los acontecimientos.
Importantes cargos socialistas de la dirección nacional y de Cataluña reconocen que el movimiento del aún presidente en funciones de la Generalitat “ha sido totalmente precipitado. Por sentido común, debería haberse mantenido hasta mayo del año próximo para defender en públicamente el programa del partido de cara a los próximos comicios”.
Las fuentes consultadas por este confidencial aseguran que “Montilla se ha escudado en que continuará al frente del partido hasta el próximo congreso, pero eso no es suficiente. La impresión de la gente es que el PSC se ha quedado sin una cabeza visible”.
