La crisis de las banderas adjudicada a Puigcercós fue provocada por un alto funcionario de la época del PSC que “quiso quedar bien”
La llegada de Joan Puigcercós a la consellería de ‘Governació i Administracions Publiques’ de la Generalitat estuvo marcada por un incidente. El edificio de su consejería apareció un día sin la bandera española. La versión que ha trascendido es que Montilla obligó a Puigcercós a deshacer la decisión que presuntamente él había tomado.
El pasado 5 de diciembre, La Vanguardia hizo saltar la noticia: el rotativo del Grupo Godó notificó que el flamante conseller de Governació, Joan Puigcercós (ERC), había ordenado arriar la bandera española del edificio de su consejería bandera que su antecesor, Xavier Sabaté (PSC), ordenó izar en su día.
El revuelo se organizó por la importancia de la Consejería y por la figura de Puigcercós, a quien -recién llegado- se tenía ‘bajo observación política’. Informaciones recogidas por El Confidencial Digital aseguran que Puigcercós no estuvo al tanto de la mencionada retirada de la bandera española, sino que se trató de una decisión tomada unilateralmente por un funcionario de la consejería.
Las fuentes consultadas por ECD sostienen que la historia nace por el comentario de pasillo realizado en los primero días de ‘La Entesa’ por varios altos cargos de ERC sin ánimo de llevarlo a cabo que, “lo primero será quitar la bandera”.
El comentario fue captado por un ‘subalterno’, un alto funcionario de la consejería contratado en la etapa del PSC y ajeno a Esquerra. Este trabajador tomó la palabra por mandato y se apresuró a llevarlo a cabo sin consultar previamente. Con el fin de ‘hacer meritos’ retiró la bandera española de su mástil en la fachada
Según las fuentes en el seno de ERC consultadas por ECD a primera hora de la mañana, cuando Puigcercós tuvo conocimiento por la Vanguardia del hecho, ordenó retirarlas todas en un intento de aplacar la polémica. Antes de las diez daba comienzo el Consejo Ejecutivo del Govern, algo así como el ‘consejo de ministros’ de la Generalitat.
Nada más entrar en la reunión y antes de que se leyera el primer punto del día, Puigcercós hizo saber a Montilla que daría las instrucciones precisas para que se cumpliera la ley, quedando zanjada la cuestión. Antes de la una de la tarde la bandera española ondeaba en la Consejería.
