La estrategia secreta de Rubalcaba para llegar a presidente: dice que le bastaría sacar 120 diputados y firmar un tripartito (que ya se está trabajando) con CiU y PNV
Rubalcaba no cede un milímetro. Crece el número de descontentos con su gestión de la oposición contra el Gobierno Rajoy. Incluso hay críticas soterradas en su equipo más cercano. Pero eso no hace mella en él porque tiene un plan que cree infalible: alcanzar La Moncloa incluso aunque lograra un resultado discreto en las generales, en el entorno de los 120 diputados.
Según ha escuchado El Confidencial Digital, en fuentes socialistas de la máxima solvencia, Rubalcaba entiende efectivamente que, a pesar de lo que dicen las encuestas, él tiene posibilidades firmes de convertirse en presidente.
Hasta ahora comentaba a sus más íntimos que se consideraba legitimado para intentar un nuevo asalto a La Moncloa sólo fijándose en lo ocurrido con Mariano Rajoy. El líder del PP, explica el secretario general del PSOE, perdió dos veces las generales, siguió como candidato, y a la tercera (las generales del 20 de noviembre de 2011) ganó.
El PP se va a desplomar
Ahora añade una hoja de ruta que ha desvelado a personas de su confianza. Y es la siguiente:
-- El PP se va a desplomar en las próximas elecciones. A su juicio, Rajoy no está elaborando un buen discurso, no sabe vender su política, por lo que los ajustes, que tanto están haciendo sufrir a los ciudadanos, y las medidas que ha tomado renegando de su propio programa electoral le pasarán factura.
-- En ese escenario, al PSOE le basta con lograr un resultado discreto en las urnas. Mejorando un poco los datos de 2011, sacando entre 115 y 120 diputados, podría formar gobierno con los apoyos de los partidos nacionalistas.
-- Piensa en CiU, PNV e incluso Coalición Canaria, fundamentalmente. Y ya ha empezado a ‘trabajarse’ a esos partidos.
Reticencias internas
Fuentes internas confirman a ECD, sin embargo, que la reacción que este planteamiento ha provocado entre varios de sus colaboradores más cercanos no es precisamente entusiasta.
Personas del perfil de Oscar López y Elena Valenciano admiten, en reuniones privadas, que la situación del partido es un desastre, que se ven incapaces de remontar, y que su líder puede estar lastrando las expectativas de futuro.
Algunos comienzan a admitir, de hecho, que Rubalcaba no podrá dar una imagen de un PSOE renovado, por la pesada herencia dejada por Zapatero y su Gobierno, del que él formaba parte. Eso es lo que se estaría reflejando en los sondeos donde el PP baja de forma continuada pero el PSOE sigue plano, no remonta.
Eso sí. Ninguno de estos disconformes está dispuesto a mover un dedo contra su secretario general. Hoy por hoy, descartan estar en cualquier maniobra contra Rubalcaba.
