Las municipales y autonómicas “obligarán” a Zapatero a su primera crisis de Gobierno para nombrar candidatos a ministros

La celebración en 2007 de elecciones municipales y autonómicas hará inevitable que Rodríguez Zapatero afronte una crisis de Gobierno.

La celebración en 2007 de elecciones municipales y autonómicas hará inevitable que Rodríguez Zapatero afronte una crisis de Gobierno. Aunque todos los presidentes se resisten a afrontar remodelaciones, y prácticamente siempre les han salido mal, la necesidad de nombrar candidatos fuertes para determinadas autonomías y capitales obligará a Zapatero a mover algunos de sus ministros a esas listas políticamente más adecuadas, y por tanto a una remodelación. En ámbitos del partido socialista ya empiezan a manejarse nombres de futuros cabezas de lista, y en esas quinielas empiezan a aparecer algunos ministros. Por ejemplo, la opción de Carmen Calvo para presentarse a la Alcaldía de Córdoba, una ciudad donde la ahora ministra de Cultura tiene bastante “pegada”. Otra ministra que está en los mentideros es la titular de Fomento, Magdalena Álvarez. Aunque ella se encuentra cómoda y a gusto en ese Departamento, al que se está dedicando con enorme interés, su nombre ha circulado como opción para Sevilla, donde las perspectivas del PSOE, con Monteseirín, están ahora a la baja, y las del PP al alza. Y los socialistas no se pueden permitir perder la capital de Andalucía. A López Aguilar tampoco le haría mucha gracia la posibilidad de ser nombrado número uno en la lista de Canarias, pero esa alternativa están siendo barajada en Ferraz, singularmente por José Blanco, la persona que al final elaborará los equipos. El PSOE reforzará igualmente las candidaturas en las capitales gallegas, donde —en este momento- las encuestas dan al PP una tendencia a la baja en todas ellas. Eso explica que haya surgido el nombre de Abel Caballero para Vigo. Una crisis en vísperas de los comicios de 2007 dará oportunidades a algunos que se quedaron a las puertas de entrar en el Gobierno. Uno de los nombres más firmes es el de Trinidad Jiménez, fuertemente apoyada por Zapatero, y que podría ser candidata a Asuntos Exteriores, o a otro Ministerio, con lo que se descartaría su nombre para enfrentarse a Ruiz Gallardón en Madrid. La opción de Javier Solana ha vuelto a manejarse para la capital. En cuanto a la Comunidad de Madrid, todo indica que Rafael Simancas repetirá, con lo que la reelección de Esperanza Aguirre parece mucho más segura, a la vista de la debilidad de su oponente. Las encuestas que maneja en estos momentos Aguirre muestran que sus resultados mejorarían los obtenidos en las pasadas elecciones autonómicas.

 

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