El nombramiento de una mujer para Justicia obligará a ZP a un cambio de Gobierno y a quitar a una ministra por la “paridad”

El anuncio de Rodríguez Zapatero de que a Juan Fernando López Aguilar le sustituirá una mujer, una ministra, va a tener como consecuencia que el presidente deberá afrontar una crisis ministerial más amplia que el simple cambio un solo ministerio, el de Justicia.   La “ley de la paridad”, impuesta por él mismo en el Gobierno, por la cual debe haber el mismo número de varones que de féminas en el Gabinete, significa que la salida un hombre, López Aguilar, y la llegada de un mujer, la nueva titular de Justicia, provocará que tenga que salir una de las actuales ministras.   Candidatas a la defenestración y con méritos probados, por cierto, no faltan, a la vista de los datos de popularidad que reflejan las encuestas, con las ministras de Vivienda y de Agricultura en los peores lugares de la clasificación.   A su vez, la persona que releve a la ministra saliente tendrá que ser un varón, siempre en cumplimiento de la “ley de paridad”.   En cualquier caso, ese movimiento podría tarde todavía bastante en realizar. Fuentes del PSOE consultadas por El Confidencia Digital llevan hasta finales de año, como mínimo, la salida de López Aguilar, con lo que la crisis podría producirse en el mes de enero, como pronto.   Algunas fuentes sugieren que el hoy ministro de Justicia intentará aguantar en el cargo incluso hasta marzo de 2007.