La ‘presidenta’ Soraya avisa: los técnicos del Gobierno se quedarán en Cataluña hasta febrero
Se mantendrán en sus puestos después del 21-D y harán un informe del trabajo realizado antes del traspaso de poderes. Moncloa considera que el nuevo Govern tardará en formarse
Quedan apenas cuatro semanas para la celebración de elecciones autonómicas en Cataluña. No obstante, la llegada del 21-D no provocará, ni mucho menos, el fin de la aplicación del artículo 155. De hecho, los técnicos enviados por Moncloa a Barcelona seguirán trabajando “en funciones” hasta que se forme un nuevo Govern. Un paso, este último, que puede alargarse en el tiempo.
Según explican a El Confidencial Digital fuentes gubernamentales próximas al Ministerio de Presidencia, Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría son conscientes del escenario político que habrá en Cataluña tras el 21-D y las dificultades para formar un nuevo Govern. Por ese motivo, “no hay nunguna prisa” para desactivar el 155.
La intervención de Cataluña, hasta febrero
Algunos de los técnicos del Gobierno enviados a Barcelona tras confirmarse la intervención de Cataluña calculaban que, una vez celebradas las elecciones, podrían volver a su día a día. No obstante, en Moncloa lo tienen claro: “Todos permanecerán en sus actuales puestos hasta, como mínimo, febrero”.
Ese mensaje, de hecho, ha sido transmitido por Soraya Sáenz de Santamaría a los secretarios de Estado y subsecretarios, todos ellos implicados en la gestión de Cataluña tras la aplicación del artículo 155.
La vallisoletana, de facto presidenta de Cataluña, ha asumido que su trabajo al frente de la administración autonómica ha de mantenerse hasta la formación de un nuevo Govern. De hecho, tiene previsto dejarse ver más por la región tras su primera visita instucional después de la intervención de la autonomía el pasado fin de semana, cuando participó en la Trobada de Economía celebrada en S'Agaró (Gerona).
Preparando el traspaso de poderes
Además de aumentar su presencia en Cataluña, Sáenz de Santamaría es consciente de que el próximo enero será un mes clave, ya que el Gobierno debe iniciar los trámites para preparar el traspaso de poderes a los nuevos inquilinos de la Generalitat.
El objetivo de la vicepresidenta es dejar constancia, por escrito, de todas las gestiones realizadas por el Ejecutivo en Cataluña desde la aplicación del 155. De esa forma, se evitarán intoxicaciones posteriores por parte del Govern entrante, sobre todo si éste vuelve a ser ocupado por los partidos independentistas.
Así las cosas, los técnicos del Gobierno enviados a Barcelona tendrán “trabajo extra” en las próximas semanas, especialmente una vez celebradas las elecciones del 21-D: “Lejos de volverse a Madrid, tendrán que hacer más horas para garantizar que todo transcurra con normalidad hasta la llegada del nuevo Govern”, explican desde Moncloa.
