Al-Qaeda enseña cómo colar bombas en aviones de pasajeros
Ha difundido un manual que incluye técnicas para fabricar explosivos indetectables y superar los controles de seguridad. Objetivos prioritarios: Easy Jet, British Airways, Air France y American Airlines
Al-Qaeda ha elaborado un completo manual en el que ofrece las claves sobre cómo atentar a bordo de un vuelo comercial. Lo ha difundido en el último número de la revista Inspire, el aparato de propaganda de Al Qaeda en la Península Arábiga.
Con estas nuevas instrucciones, destinadas principalmente a los musulmanes residentes en Estados Unidos y en países occidentales, el colectivo terrorista busca revivir una de sus principales formas de causar terror: introducir bombas en aviones de uso civil.
En el documento, al que ha tenido acceso El Confidencial Digital, los responsables de la publicación dotan a futuros lobos solitarios de todas las herramientas necesarias para facilitar este tipo de actuaciones.
Ofrece un completo manual actualizado en el que se explican todas las claves para llevar a cabo, con éxito, un atentado de estas características. Para ello, exponen con detalle desde técnicas que ayuden a sortear los controles de seguridad aeroportuaria, hasta cómo fabricar un explosivo, cuál es el asiento idóneo para causar más daño o qué aerolínea elegir para perpetrar la matanza.
En numerosas ocasiones, miembros de Al-Qaeda han mostrado su preferencia por este tipo de atentado. Recuerdan es un proceso de gasto muy reducido en comparación con el daño económico que causa (en atentados similares, las aerolíneas se han enfrentado a pérdidas multimillonarias).
Este manual no hace sino confirmar que Al-Qaeda no ha olvidado uno de sus principales objetivos: atacar aerolíneas civiles.
Cómo pasar los controles de seguridad
El primer punto del informe desarrolla cómo evitar los problemas durante los controles de seguridad de los aeropuertos y poder introducir el explosivo dentro de cualquier vuelo comercial.
Según explican en el texto al que ha tenido acceso ECD, “cualquier sistema de seguridad, ya sea humano o mecánico, tiene puntos débiles de los que poder aprovecharse si se conocen bien”.
La seguridad aeroportuaria suele llevarse a través de uno o varios de los siguientes cuatro procesos:
-- Detectores de metal: diferencian entre los dos tipos que normalmente operan en los aeropuertos de todo el mundo. Los manuales y los fijos.
-- Detectores olfativos: tanto perros entrenados para la identificación de explosivos a través de los gases que emanan, como máquinas que cumplen con esta misma función.
-- Cacheos o detectores externos. También explica dónde colocar el explosivo para que no sea fácilmente identificable.
-- Escáner corporal: este tipo de detector tiene una gran ventaja y un gran inconveniente para los terroristas. El inconveniente es que la bomba que proponen fabricar no pasaría nunca un control de estas características sin ser claramente identificada. La ventaja es que este tipo de dispositivos sólo suelen utilizarse en aeropuertos locales de Estados Unidos principalmente, además de algunos de Reino Unido y Holanda.
En los cuatro casos, los redactores del manual explican en qué consiste cada uno, definiendo sus diferentes aplicaciones y las técnicas para sortearlos. ECD no ofrece más detalles de los procedimientos que describe Al Qaeda por motivos de seguridad.
Cómo fabricar la bomba
El segundo apartado del manual está dedicado a explicar cómo fabricar, paso a paso, un explosivo indetectable con herramientas y materiales domésticos. No incluye ningún componente metálico y el contenedor es una simple botella de plástico.
El objetivo es que el explosivo sea capaz de pasar todos los controles de seguridad. Para ello, enumeran una serie de características que van desde qué componentes son los más adecuados hasta dónde esconderla para que no la encuentren, ni siquiera durante un cacheo.
Un punto en el que hacen especial hincapié es que el terrorista sea capaz de identificar el mejor sitio dentro del avión para hacer estallar el artefacto. A través de una serie de fotografías señalizadas con flechas, precisan cómo debe situarse para causar el mayor daño posible: justo en los asientos situados sobre las alas –cerca de los depósitos de combustible- y en la cola.
Objetivos prioritarios para los lobos solitarios
La última parte del escrito difundido desde la organización terrorista indica los objetivos que consideran prioritarios en este momento. Todos ellos, pertenecientes o relacionados con tres países a los que ahora mismo tienen en su punto de mira: Estados Unidos, Inglaterra y Francia.
En primer lugar, dedican un apartado a enumerar las aerolíneas comerciales en las que aconsejan atentar. A saber: Easy Jet, British Airways, Air France, American Airlines, United, Continental Airlines, Delta.
Una vez acotadas las compañía, también sugieren una serie de consejos a tener en cuenta antes de seleccionar el vuelo. Elegir un aeropuerto con unas medidas de seguridad fácilmente sorteables, que el vuelo sea de larga distancia -para disponer de tiempo suficiente- o llevar a cabo la operación a una altitud determinada son algunas de las recomendaciones que enumeran.
Por último, también hacen mención a la conveniencia de aprovechar la acción terrorista para atentar contra objetivos estrella. Hablan de personalidades del mundo económico, como Ben Shalom Bernanke, actual Presidente de la Reserva Federal en los Estados Unidos o propietarios de grandes multinacionales, como Bill Gates.
Vea, a continuación, imágenes del documento:
