El CNI envía más agentes a Siria para buscar a los periodistas españoles desaparecidos
Se baraja la posibilidad de que se encuentren retenidos por un grupo de delincuentes
El Gobierno intensifica las labores para localizar a los tres periodistas españoles que están desaparecidos en Siria desde el pasado 11 de julio. Exteriores ya habla de secuestro. Mientras, el CNI refuerza su presencia en el país para tratar de encontrarles y conseguir la liberación.
El fotógrafo leonés José Manuel López y los periodistas Antonio Pampliega y Ángel Sastre podrían encontrarse retenidos en Siria desde el pasado 11 de julio, cuando dejaron de dar señales. El ministro de Asuntos Exteriores, a través del ministro García Margallo, ha admitido que no se descarta la posibilidad de un secuestro.
Los tres informadores entraron recientemente en el país desde Turquía. Su destino era la ciudad de Aleppo, donde tenían previsto realizar unos reportajes. Se trata de la mayor población de Siria actualmente en disputa entre el gobierno de Bashar Al Assad, los rebeldes y el Estado Islámico, que controla pequeñas aldeas al norte de Aleppo pero no tiene control efectivo en la zona-.
Entre Al Qaeda y el Estado Islámico
Según explican a ECD fuentes involucradas en la investigación en marcha, los periodistas habrían desaparecido en una zona donde son habituales los grupos de delincuencia organizada, que buscan hacer negocio en esta zona devastada.
Por ello, una de las hipótesis que se maneja en estos momentos es que hayan sido retenidos por alguno de estos grupos delictivos, a medio camino entre los rebeldes de Al Nusra –fieles a Al Qaeda- y el Estado Islámico.
Agentes del CNI en Siria
Según fuentes de la inteligencia española, consultadas por El Confidencial Digital, el Centro Nacional de Inteligencia va a enviar en las próximas horas varios agentes más a Siria, que se unirán a los que ya trabajan allí sobre el terreno desde el año pasado.
España mantiene agentes de campo e investigadores del CNI en Siria sobre todo con el objetivo de seguir la pista a todos los ciudadanos españoles –o con permiso de residencia- que hayan viajado al país para unirse a algún grupo combatiente, principalmente al Estado Islámico.
Su misión es detectar cualquier pista sobre sus movimientos, su participación en atentados o ataques, sobre su posible fallecimiento, y también sobre su intención de volver a España próximamente (son los denominados ‘retornados’).
Según explican fuentes próximas al Centro Nacional de Inteligencia, los agentes que operan allí están “saturados de trabajo” en estos momentos, y por tanto sin muchas posibilidades de dedicarse a buscar a los periodistas desaparecidos, por lo que el refuerzo de personal se orientará específicamente a esa tarea de localización y, en su caso, liberación.
Siria es, desde 2013, el país más peligroso del mundo para los periodistas. Allí se han registrado más de cuarenta secuestros, la mitad de todas las capturas de profesionales de la información ocurridos en el mundo
