¿Cómo está ETA ahora, qué piensa? El Gobierno pide continuamente al CNI información sobre lo que pasa en la banda: el Centro ha priorizado los trabajos de inteligencia
El anuncio de ETA de que abandonaba las armas no ha significado para el Centro Nacional de Inteligencia una disminución de su esfuerzo en la lucha antiterrorista, ni una reducción de efectivos para dedicarlos a otras misiones. Pero ha cambiado el tipo de labor. Ahora es más de inteligencia. También porque el Gobierno le pide constantemente información sobre cómo está la banda por dentro.
Fuentes cercanas al CNI, a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital, revelan que el Centro no ha aprovechado el cese de la actividad terrorista para ‘redistribuir’ sus agentes, dedicándolos a otros cometidos en otras áreas de la seguridad. Al contrario. Ahora es incluso “más delicado” su trabajo respecto a ETA.
De acuerdo con esas fuentes, hoy ya no se trata sobre todo de trabajo sobre el terreno: de buscar comandos, de realizar seguimientos, de buscar y encontrar zulos con armas y explosivos. Algo que llevaban años haciendo y en lo que han conseguido muy importantes éxitos.
El trabajo principal del CNI en este momento, en relación con ETA, ha pasado a ser sobre todo una labor de inteligencia: averiguar con exactitud que piensan, qué van a hacer a corto y medio plazo, cuál va a ser su estrategia en la nueva situación… Lo cual requiere infiltración primero y después análisis cuidadoso.
Las fuentes reconocen que el Gobierno de Mariano Rajoy demanda constantemente esa información: necesita saber qué se cuece dentro de la banda, qué pasos van a dar, pero también desea interpretar adecuadamente sus anuncios y comunicados, saber qué quieren expresar y que se esconde detrás de cada palabra.
“Eso exige un trabajo mucho más complicado, de inteligencia”, reconocen las fuentes consultadas por ECD.
El CNI quiere estar en condiciones de responder con certeza a esas preguntas continuas que le formulan desde el Gobierno.
