Expertos en yihadismo consideran improbable la hipótesis de un atentado terrorista en el A320 de Germanwings
No ha habido reivindicación tres días después, pudo haber estrellado el avión en una ciudad, no tiene vínculos con el islamismo, no se registraron rezos en cabina
La investigación sobre el accidente del Airbus A320 de Germanwings ha dado un giro completo tras conocerse que el copiloto inició voluntariamente el descenso. Cobra fuerza la hipótesis del suicidio, e incluso la posibilidad de que se trate de una inmolación terrorista. Expertos y analistas consideran “improbable” un atentado.
La fiscalía francesa no descarta todavía que el accidente de Germanwings se deba a un acto terrorista. Sin embargo, los datos recabados hasta el momento, que ya están siendo analizados por los servicios de información antiterrorista españoles, parecen situar esta opción como “poco probable”.
En primer lugar, los expertos antiterroristas a los que ha consultado El Confidencial Digital destacan la “ausencia de una reivindicación”. Tanto personal –una nota, un vídeo-, del propio copiloto, como “a nivel organizativo”, es decir, de un grupo terrorista como el Estado Islámico, Al Qaeda o alguna de las filiales de ambos.
Además, recuerdan que en caso de que existiese algún vínculo con el terrorismo islámico, la reivindicación hubiera sido "casi inmediata". Cabe recordar que los expertos ponen en duda muchas de las reivindicaciones del Estado Islámico, ya que se han detectado instrucciones para que se atribuya al grupo cualquier acción o ataque registrado en cualquier parte del globo.
Por otra parte, destacan que en caso de producirse un secuestro de la aeronave, lo más “lógico” desde el punto de vista ‘destructivo’ del yihadismo sería poner rumbo hacia un objetivo donde el daño causado sea mayor. “Sería mucho más grave dirigir el vuelo a París o Marsella u otra ciudad y estrellarlo” aseguran estas fuentes.
Además, a funcionarios que trabajan para la seguridad del Estado en el terreno del yihadismo les llama la atención que “no se hayan registrado gritos o rezos en el último momento del impacto”. Frases como las habituales ‘Ala es el más grande’ (‘Allahu Akbar’), que sí se recogen por ejemplo en los últimos segundo de la grabación del vuelo 93, estrellado en Pensilvania el 11 de septiembre de 2001.
En cuanto al perfil de Andreas Lubitz, destacan que “en principio no parece haber ninguna motivación religiosa”. No figuraba como sospechoso en ningún registro y, “por el momento”, no se conoce ninguna relación con el islamismo.
