El Instituto Geológico Minero concluye que el almacén de gas Castor causará más terremotos si reanuda su actividad

Un estudio determina que el almacén de gas en las costas de Vinaroz (Castellón) induciría terremotos de entre tres y cuatro grados en la escala de Richter

Plataforma Castor en la costa de Levante.
Plataforma Castor en la costa de Levante.

Los científicos han concluido su estudio y confirman los temores. Si se autoriza de nuevo la actividad en el almacén de gas Castor se producirán más seísmos en el litoral castellonense.

Esta conclusión lleva, irremediablemente, a paralizar el almacén de modo definitivo como única opción para que no vuelvan los temblores de tierra en la zona del golfo de Valencia y en la provincia de Castellón.

En los meses de septiembre y octubre se produjeron más de 500 seísmos, algunos de ellos con una intensidad de más de cuatro grados en la escala de Richter, con gran alarma de la población

Los expertos ultiman el estudio

El estudio, que se está ultimando con detalle, se entregará por parte de los científicos esta semana a Industria, a petición del propio Ministerio, que siempre ha asegurado que Castor no reanudará su actividad si no hay garantía total de que no induzca seísmos.

En el informe de los científicos, como ha podido confirmar El Confidencial Digital, consta explícitamente la petición de que se mantenga la orden de paralización, pero implícitamente la recomendación es que continúe inactivo, por el riesgo directo de nuevos movimientos sísmicos en tierra y mar.

Terremotos previsibles entre 3 y 4 grados

Según los expertos, el fenómeno producido por Castor responde a una “sismicidad inducida”, y en concreto prevén que los seísmos no superen los tres grados en la escala de Richter, con lo que la mayoría de los seísmos no serían percibidos por la población.

Sin embargo, también han estudiado la falla que provocó los seísmos de más de cuatro grados en la escala de Richter y, “aunque es pequeña y no esperan que provoque terremotos de más intensidad, no se descarta que, por inducción de la propia falla, se produzcan nuevos terremotos que podrían superar los cuatro grados, que sí se percibirían por la población y en las viviendas.

El riesgo es objetivo y los ciudadanos siguen movilizándose, sobre todo al comprobar que, desde que el almacén de gas dejó de estar activo, no se han producido terremotos sensibles.

 

Todos los ayuntamientos de la zona, la Diputación de Castellón y la Generalitat Valenciana han solicitado en estas pasadas semanas que el almacén de gas no reanude su actividad si no está garantizada al cien por cien la seguridad.

El ministro de Industria, José-Manuel Soria, en todo momento ha supeditado la reanudación de la actividad del almacén a que, científicamente, no haya probabilidad de movimientos sísmicos a causa de la inyección de gas, por lo que este estudio del Instituto Geológico Minero aboca al cierre definitivo.

El 10 de noviembre los ciudadanos de la zona rodearán la planta terrestre, en Vinaroz, exigiendo el cierre definitivo y que no se pague indemnización a la empresa.

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