Oficiales y agentes de la Guardia Civil se movilizan para defender el carácter militar del cuerpo. Han creado la Asociación ProGC y Rubalcaba está con ellos
“Queremos a la Guardia Civil de toda la vida, la militar”. Un grupo de oficiales y agentes de la Benemérita rechazan de plano la desmilitarización del cuerpo y se han agrupado en una nueva asociación: APROGC (Asociación Pro Guardia Civil). Alfredo Pérez Rubalcaba es su mayor apoyo.
Las llamadas asociaciones de clase han convocado para hoy y para el próximo sábado movilizaciones reclamando al Gobierno que “rectifique su política económica y laboral”. Aseguran que asisten “con preocupación a un proyecto de remilitarización de la seguridad pública”.
Los mandos de la Guardia Civil, en cambio, son firmes partidarios del carácter militar de la Benemérita. Agrupados en la citada APROGC (donde también hay, en su mayoría, agentes rasos), defienden que los miembros del cuerpo deben abstenerse de llevar a cabo actividades políticas o sindicales, manteniéndose en la más estricta neutralidad.
“No podemos, ni debemos hacer ningún tipo de consideración, apoyo o llamamiento al respecto de manera pública. El deber de neutralidad significa que no se puede participar de ninguna de las opciones, ni a favor ni en contra”, defienden los mandos del cuerpo.
En los propios estatutos de la APROGC se descarta de manera clara participar y organizar manifestaciones callejeras o huelgas de celo. Creen que así sólo se ridiculiza al uniforme y se insulta a las señas de identidad de la Benemérita.
Los generales ya trasladaron hace algunos meses al propio ministro del Interior su inquietud por la situación que se está viviendo en el cuerpo, pero sobre todo porque temen por la condición de militares que le otorga la actual legislación, y que creen que es consustancial con el cuerpo. Piensan que de nuevo está en peligro. Rubalcaba les dio garantías de que no habrá ningún cambio –lea aquí la noticia-.
La APROGC considera que “si la Guardia Civil cuenta con más de 160 años de historia es en gran medida por haberse mantenido al margen de opciones y disyuntivas políticas y sindicales”. Piden a los agentes que no secunden convocatorias de asociaciones que violan su deber de neutralidad y que sólo buscan el interés de unos pocos.
