Otegi ha dado orden a su abogada para que su siguiente juicio se celebre cuando ETA haya abandonado las armas: da por seguro que ha llegado el final de la banda

Arnaldo Otegi quiere que sus procesos judiciales se celebren en un periodo de paz. El exportavoz de Batasuna tiene pendiente aún la causa judicial que investiga la reconstrucción de Batasuna a través del proyecto Bateragune. El procedimiento pinta muy mal para el de Elgóibar.

La causa más grave que pesa sobre Otegi es el proceso contra las distintas mesas nacionales de HB, EH y Batasuna. El juez Baltasar Garzón acusó a casi cuarenta miembros de la ilegalizada formación por ser el brazo político de ETA en las instituciones y no respetar la sentencia de prohibición de actividades.

Fuentes de toda solvencia consultadas por El Confidencial Digital aseguran que Otegi tiene muy difícil librarse de esta causa. Añaden que, probablemente, se le imponga una condena de entre diez y doce años de prisión.

El exportavoz de Batasuna trabaja con el objetivo de que este juicio se celebre en un periodo de paz en España. Las fuentes consultadas por ECD explican que Otegi ha dado orden a su abogada, Jone Goirizelaia, para que el proceso se desarrolle tras el final de la violencia etarra.

Otegi es uno de los dirigentes de la izquierda ‘abertzale’ que más está presionando a ETA para que abandone definitivamente las armas. Creen que “los de las pistolas pueden acabar pronto”, lo cual cambiaría radicalmente, según él, el contexto en el que se celebraría su juicio.

En estos momentos, está pendiente que la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional decreta la fecha del juicio contra la cúpula de Batasuna. Otegi quiere, como decimos, que la vista oral se celebre lo más tarde posible.

La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal está formada por los magistrados Teresa Palacios, Juan Francisco Martel y Ángela Murillo. Otegi pidió hace un mes la recusación de este mismo tribunal por un enfrentamiento dialéctico la Murillo: “¿Usted condena rotundamente la violencia?”, le preguntó la jueza. “No voy a contestar”, respondió Otegi. La juez añadió: “Muy bien, ya lo sabía”.

Arnaldo Otegi continúa en la prisión de Logroño y comenta a su entorno que la violencia de ETA acabará pronto. Lee todo tipo de prensa (de alcance nacional y local) y los dirigentes de la izquierda ‘abertzale’ le consultan todas las decisiones.

 

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