ETA recrudece sus atentados para forzar al Gobierno a negociar

Los últimos atentados de ETA demuestran que la banda terrorista pretende poner muertos sobre la mesa. Su estrategia no es otra que la de forzar al Gobierno a una nueva negociación.

-- La potente furgoneta bomba contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Burgos y sendas bombas lapa colocadas en dos vehículos oficiales del cuerpo en Calvià evidencian que ETA ha pretendido causar la muerte. En el caso, insular, sus intenciones asesinas se cumplieron.

-- ETA ha conseguido lograr una gran repercusión con sus dos atentados. No sólo en España, sino también en el extranjero. De hecho, multitud de medios foráneos han recogido en sus portadas ambas acciones terroristas, aún más si cabe en el doble asesinato insular, pues la zona es un lugar de gran afluencia turística.

-- El objetivo de la banda terrorista es poner al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en un brete. A la complicada situación económica que vive el país se suma ahora la preocupación por el terrorismo.

-- El excelente trabajo de las Fuerzas de Seguridad del Estado y la ilegalización de todos los brazos políticos de ETA habían puesto a los pistoleros contra las cuerdas. Pero esa aparente debilidad no es tal. Al menos es lo que los pistoleros quieren aparentar.

-- La banda se ha fijado como prioridad representar que su operatividad y su infraestructura son potentes y pueden provocar mucho dolor a la sociedad española. Lo hizo en Burgos, al imitar el modelo de furgoneta empleada con la de un vecino de la zona, al que tuvo que haber vigilado durante un tiempo. Y lo repitió en Mallorca, una isla de difícil escape en teoría. Así demuestran que no están, ni mucho menos, acabados.

--  Los pistoleros pueden y van a seguir intentado asesinar. Esta es la conclusión a la que llego el ‘Zuba’ (comité de dirección de ETA) tras un proceso de debate interno que ha durado dos años y que ha concluido hace unos meses: hay que poner muertos sobre la mesa.

-- Una de las históricas dirigentes de ETA, Belén González Peñalva, alias ‘La Tigresa’, aseguró que cuando la banda quiera negociar con cualquier Ejecutivo, lo que tendría que hacer es “poner cien muertos encima de la mesa”.

-- La conclusión, por tanto, es que ETA quiere forzar al Gobierno a iniciar una nueva negociación para conseguir sus objetivos.

 

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