¿Está definitivamente hundida la selección de baloncesto?

La derrota en los cuartos de final del Mundobasket de Turquía ante Serbia no ha sido una más. Para muchos, con el asombroso triple que el base serbio Milos Teodosic convirtió a tres segundos para el final del partido concluye un ciclo de cinco años plagado de éxitos, en los que la Selección siempre ha optado a medalla. ¿Cuáles han sido entonces las causas que han propiciado el fracaso de la ÑBA?

-           España acusó la falta de concentración. Las cenicientas del Mundial, esos equipos que llegaban al torneo no con la idea de obtener una medalla sino con la predisposición de quedar entre las ocho primeras plazas jugaban su mejor baloncesto ante la selección. Quizá se debiese a que sin Pau Gasol ni Calderón el equipo se vuelve mundano y vencible ante rivales como Nueva Zelanda o Francia, o que la etiqueta de favorito mermó la concentración del grupo. Mientras los resultados acompañaron, poco importó que un equipo muy por debajo de la calidad de la selección cogiese el doble de rebotes ofensivos que el equipo nacional. En cambio, cuando caíamos en partidos con marcadores ajustados, fue la ausencia de Pau Gasol y Calderón lo que nos sirvió como excusas.

-           Después de sufrir una derrota como la de vivida ante Serbia, es habitual que el trabajo del seleccionador sea el primero que se ponga en duda. La dirección de Sergio Scariolo fue acertada, aunque no tanto como se esperaba teniendo en cuenta los resultados obtenidos en el Eurobasket de Polonia del año pasado. Las primeras criticas al técnico comenzaron con la lista de doce jugadores que acudían al Mundial, cuando el transalpino descartó a Rafa Martinez, escolta del Power Electrics Valencia. El corte pilló por sopresa, dadó el gran rendimiento del escolta durante toda la temporada. Ya en el campeonato, en más de una ocasión se ha vio indeciso y poco acertado al transalpino en las rotaciones del equipo y en los momentos de mayor tensión. Como en la derrota contra Estados Unidos en el último partido de preparación, cuando perdiendo de un punto y a falta de pocos segundos para finalizar el último cuarto Scariolo solicitó tiempo muerto. Durante este tiempo, las cámaras recogierón las dudas y la incertidumbre del seleccionador para elegir una jugada de banda. Al reanudarse el encuentro, el lanzamiento de España fue bloqueado por un jugador americano en dos ocasiones durante la jugada. Tres de los cuatro partidos perdidos se han decidido en la última posesión, que ha correspondido a España en todas las ocasiones. En ninguna de ellas se pudo ejecutar un tiro sin obstrucción.

-           La decisión personal de Pau Gasol de no acudir a la cita mundialista para poder descansar después de seis veranos jugando con la selección, levantó las primeras dudas entre la afición sobre la posible revalidación del titulo. Unas dudas, que no se materializaron en miedos hasta los cruces posteriores a la primera fase. La buena química de la que este grupo ha hecho siempre gala, incluyendo las nuevas incorporaciones, ha propiciado que la seleccón sea vista como un grupo de amigos que hace piña hasta para decidir el sitio donde se va a cenar. Sin embargo, Scariolo no lo tuvo fácil a la hora de confeccionar un equipo en el que, a pesar de ser considerado un bloque, es inevitable obviar que el de Sant Boi ha sido el epicentro desde 2003, cuando fue seleccionado número 3 del Draft de la NBA por los Memphis Grizzlies.

-           La baja de última hora deJosé Manuel Calderón durante el partido de preparación ante Estados Unidos, obligó a Scariolo a convocar al base del Khimki ruso Raul López. Esta decisión no fue entendida por los expertos, ya que el seleccionador sustituía al base de los Toronto Raptors, principal director de juego del equipo, por un jugador que ni siquiera había sido convocado en la lista de los primeros quince jugadores anunciada al comienzo del verano. Raul López, natural de Vic, tuvo que afrontar sus primeros minutos de esta convocatoria en la primera fase del campeonato, lo que le relegó al banquillo al no encontrarse en la misma forma que el resto de compañeros.

-           Gran parte de la responsabilidad recayó en Ricky Rubio. El niño prodigio del baloncesto español se ha visto obligado, con tan sólo veinte años, a tomar las riendas de la subcampeona olímpica. La impaciencia propia de la edad y el exceso de presión, provocó que en más de un partido Ricky se revolucionase y perdiese el norte. En el encuentro de cuartos ante Serbia, el base acusó la responsabilidad y demostró que aún es demasiado joven para tirar de la selección.

-           En un deporte donde la altura es un plus, el juego de los pivots debe ser siempre la primera opcion de ataque. La lesión cervical de Felipe Reyes, que se vio obligado a viajar hasta Madrid para ser tratado; el protagonismo mediático de Gasol, que se vio abrumado por la sombra de su hermano; la irregularidad de Fran Vázquez, que daba una de cal y otra de arena; y la poca confianza en Victor Cláver, que acabó situándose lejos del grupo durante los tiempos muertos fueron algunas de las circunstancias por la cual el juego interior de España no asumió el papel que le tocaba.

-          Juan Carlos la 'Bomba' Navarro se dejó llevar en jugadas cruciales por la intensidad y pasión del momento con contrataques mal finalizados, asistencias arriesgadas y tiros precipitados. El jugador catalán olvidó la responsabilidad que  su condición de capitán le obligaba a ejercer.

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