El trasfondo del nombramiento de dos nuevos cardenales en España y las salidas bloqueadas de Ricardo Blázquez

Los nombramientos de los arzobispos de Barcelona y Valencia como nuevos cardenales, tienen detrás argumentos novedosos, a la vez que provocarán problemas añadidos al obispo de Bilbao, y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez.

Los nombramientos de los arzobispos de Barcelona y Valencia, Martínez Sistach y García Gasco, respectivamente, como nuevos cardenales, tienen detrás argumentos novedosos, a la vez que provocarán problemas añadidos al obispo de Bilbao, y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez.

La decisión de la Santa Sede de elevar al cardenalato a los dos arzobispos es analizada así en ámbitos eclesiásticos de máxima solvencia consultados por El Confidencial Digital:

-- La designación de Martínez Sistach estaba descontada. Era casi obligada, por su condición de arzobispo de una diócesis como Barcelona. Más que una cuestión de merecimientos, el Vaticano ha tenido en cuenta razones de conveniencia: no se puede “ofender” a la capital de Cataluña con una discriminación.

-- El nombramiento de García Gasco ha sido más inesperado, por lo mismo que ya había presentado la renuncia tras haber cumplido los 75 años. El capelo da a entender que la idea ahora es que continúe al frente de la diócesis un par de años más como mínimo.

-- Esa circunstancia cierra a Ricardo Blázquez la salida de Bilbao. Cubiertas anteriormente Zaragoza y Pamplona, a las que pudo ser destinado, no quedan ya archidiócesis vacantes. Tendrá que continuar en la capital vasca.

-- El nombramiento de García Gasco se interpreta como un deseo de Benedicto XVI de recompensarle por la exitosa celebración de la Jornada de las Familias en Valencia, pero también es demostración de que existe inquietud por la situación de la Iglesia en España, puesto que se ratifica la línea de firmeza que encabezan Rouco Varela y Cañizares.

-- La presencia de cinco cardenales en la Conferencia Episcopal Española (los titulares de Madrid, Toledo, Sevilla, Barcelona y Valencia) plantea la conveniencia de que sea presidida por uno de ellos, y todo apunta a la candidatura de Antonio María Rouco. El arzobispo de Madrid se lo está pensando.

-- Rouco tendría muy fácil la elección al frente del episcopado, puesto que ahora no necesita mayoría cualificada, y la vez anterior no logró el tercer mandado sólo por un voto.

-- Si Blázquez no resultara reelegido, sería la primera vez que algo así ocurre en la Conferencia Episcopal y su figura no saldría muy bien parada. Ese argumento podría jugar a su favor, puesto que algunos prelados se plantearán darle el voto precisamente para que no se le deje en evidencia con una salida tan rápida. Son factores que suelen jugar en el ámbito eclesiástico.

Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato