Alerta cooperación: los voluntarios españoles de ‘verano’ viajan a sus destinos sin seguro de vida y asumen todos sus gastos. Las fallecidas en Perú sí contaban con póliza
Tras el trágico accidente acaecido la semana pasada en Perú en el que fallecieron cuatro cooperantes españolas, salen a la luz los riesgos a los que se enfrentan las personas que deciden de modo altruista arriesgar sus vidas en países subdesarrollados.
El conocido como ‘turismo solidario’ es una de las fórmulas de voluntariado que se ha consolidado en los últimos años en España. A través de estos programas, se ofrece la oportunidad de convivir con una ONG en el terreno y colaborar en los proyectos de cooperación y desarrollo en América Latina, África o Asia.
Según ONGs consultadas por El Confidencial Digital, el perfil medio del cooperante español es el de una mujer de 25 a 45 años, con estudios universitarios y con un salario base de entre 1.000 y 2.000 euros mensuales brutos.
Sin embargo, este voluntariado solidario cuenta con una serie de riesgos en el terreno que en ocasiones llega a poner en peligro la vida de estos cooperantes. Un reciente caso ha sido el fallecimiento de las cuatro cooperantes españolas en Cuzco (Perú, cuando la camioneta de la organización que las transportaba se salió de la carretera y cayó a un barranco de unos 300 metros de profundidad, mientras hacían turismo por la zona.
Estas organizaciones explican a ECD que los “turistas solidarios” asumen una serie de gastos importantes no aptos para todos los bolsillos, que van desde el desplazamiento, hasta la estancia en el lugar. Sin embargo, lo más llamativo es que estos voluntarios suelen viajar sin seguro de vida y en caso de accidente o fallecimiento los gastos son asumidos por ellos o sus familiares.
En caso de defunción, las compañías de seguros consultadas aseguran que la repatriación de los cuerpos ronda los 6.000 euros por fallecido desde América Latina a España por lo que viajar sin pólizas de viaje se convierte en toda una irresponsabilidad.
