Cuatro regiones de Bolivia se declaran en rebeldía contra Evo Morales mientras el Ejército afirma que defenderá la integridad del país
La situación política en Bolivia está empeorando y tras el abandono de la Asamblea Constituyente por la oposición y las peticiones de independencia de la prefectura de Santa Cruz ahora son cuatro los estados que plantean la desobediencia civil. El Ejército boliviano se muestra tajante y asegura que defenderá la integridad del territorio.
El gobierno de Evo Morales atraviesa una de sus mayores crisis, la misma que ha colocado al país andino en una encrucijada histórica que ha llevado a algunos analistas a alertar del peligro de un enfrentamiento civil. Los hechos más recientes apuntan a una escalada de la tensión entre la oposición y el MAS, partido del líder cocalero en el gobierno.
Las regiones de Santa Cruz, Beni, Oando y Tarija están manteniendo un pulso en las últimas semanas con el ejecutivo de Evo Morales. La causa más visible del enfrentamiento es la decisión del ejecutivo del líder cocalero sobre el sistema de votación en la Asamblea Constituyente que se encuentra trabajando en la redacción de un nuevo texto constitucional. Recientemente el vicepresidente del Comité Cívico cruceño, Jaime Santa Cruz, afirmó que “esta región sólo levantará sus medidas si el oficialismo se compromete ante la Iglesia Católica a respetar la autonomía departamental y los dos tercios en la Asamblea”.
A la situación de crisis ha contribuido el comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia (FFAA), Wilfredo Vargas, quien ha realizado en fechas recientes unas equívocas declaraciones sobre la postura que la institución que dirige va a adoptar ante la situación. A su juicio las Fuerzas Armadas mantendrán la integridad territorial de la nación “pero no creo que usemos las armas entre los bolivianos. Los malos bolivianos querrán enfrentarnos, pero la Patria no se toca, porque es de todos los bolivianos y es responsabilidad de esta institución mantener su estabilidad y unidad territorial” afirmó.
Las declaraciones del jefe militar salen al paso de la petición que realizó el propio Morales al ejército para que se posicionara. El mandatario solicitó a las Fuerzas Armadas “cumplir su deber de defender la Patria y pronunciarse respecto de los manifiestos públicos que se hacen desde algunas regiones y que amenazan la integridad nacional”.
La última amenaza desde las prefecturas rebeldes es convocar los cabildos autónomos. Para el viernes 15 de diciembre están convocadas asambleas simultáneas por los prefectos y comités cívicos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija, con las que pretenden exigir al Gobierno que mantenga el sistema de mayoría por dos tercios en la Asamblea Constituyente y permite el proceso autonómico.
De un tiempo a esta parte la pujanza del autonomismo en algunos estados ricos bolivianos ha difundido rumores de varios ‘golpes de Estado’ contra el gobierno de Evo Morales. Un intento real se contó en El Confidencial Digital el pasado 23 de noviembre, cuando se reveló que ciertos emisarios de terratenientes bolivianos del departamento de Santa Cruz habían venido a España para contratar los servicios de mercenarios.
