El Gobierno de Cuba silencia una epidemia de dengue que ya se ha cobrado decenas de muertes: ECD les ofrece un testimonio de primera mano

Según ha publicado el Miami Herald, Cuba mantiene en secreto la existencia de un brote de dengue en la Habana. Por lo menos veinte muertos y decenas de personas hospitalizadas es el saldo provisional de un brote epidémico de dengue que las autoridades cubanas ocultan y que tiene abarrotados varios hospitales de Ciudad Habana y seriamente preocupados a los residentes de la capital.   Las salas de emergencia de los hospitales Miguel Enriquez, Covadonga y 10 de Octubre están llenas de pacientes con fiebre alta y claros síntomas de la enfermedad que es transmitida por el mosquito “Aedes Aegipty”.   La prensa oficial no ha dado cuenta de este brote epidémico, que se ha desarrollado en el marco de un gran despliegue informativo y publicitario en torno a la enfermedad del dictador Fidel Castro. “Creo que el Gobierno no ha decretado la epidemia porque teme empañar su imagen y evitar preocupaciones a los futuros visitantes, ya que estamos en vísperas de la Cumbre del Movimiento de los No Alineados'”, argumentó la fuente a la que tuvo acceso el Miami Herald.   El Confidencial Digital ha tenido acceso a un ciudadano cubano que tiene información de primera mano sobre lo que está ocurriendo en Santiago de Cuba. A continuación ofrecemos su testimonio:   “Aparece en el Miami Herald la noticia de que el Gobierno cubano trata de ocultar una epidemia de dengue en La Habana, pero la realidad es más terrible. En Santiago de Cuba la epidemia de dengue y paperas se ha cobrado muchas víctimas mortales y los hospitales están completamente desbordados, se limitan a bajar la fiebre y luego mandan a los pacientes a sus casas, donde después de episodios con vómitos sanguinolentos suelen fallecer”.   “En La Habana, en especial, en los asentamientos de los damnificados por los derrumbes producidos por los huracanes del año pasado, sitos en Arroyo Naranjo, los contagios producidos por el mosquito “Aedes Aegypti”, debido a la carencia de infraestructuras para evacuar las aguas albañales, son numerosísimos, es muy común que los niños que juegan en los exteriores, cerca de estas aguas, por estar en periodo vacacional se contagien de dengue. Los muertos por la enfermedad son camuflados entre los demás decesos con variopintas explicaciones, tales como ulceras sangrantes, gripe y otras más”.   “La caótica situación en la isla se agrava cuando llega la hora de que la funeraria entre en acción, pues si no tienes ‘chavitos’ -pesos cubanos convertibles- para sobornar a la funcionaria encargada de realizar los trámites en el hospital o directamente al funcionario de la funeraria, la contestación de que no hay capacidad para enterramientos es la respuesta, por lo que es común que pasen una media de 48 horas hasta que el entierro se produce con el consiguiente riesgo de contagio durante el velatorio, pues los mosquitos que pican al muerto se convierten en vector de transmisión”.