Inmigración: El Gobierno busca ahora extender a países subsaharianos la fórmula “repatriación por ayuda al desarrollo”

La previsible avalancha inmigratoria se ha hecho real, la prensa europea mira a Ceuta y Melilla y el Gobierno español busca con urgencia cauces que permitan la repatriación de extranjeros a cambio de ayuda al desarrollo. El problema inmigratorio requiere del establecimiento de vías de cooperación eficaces con múltiples países: así, naciones subsaharianas son territorios emisores, en tanto que Argelia y Marruecos son, respectivamente, tierras de paso y punto de partida. Con cada país han de establecerse, pues, protocolos distintos. Al Gobierno español se le reconoce haber aportado la idea de proponer a los países originarios de inmigrantes un pacto bilateral que contemple acuerdos de repatriación a cambio de ayuda al desarrollo. La ayuda al desarrollo se configura como un aliciente para el país emisor de cara al cumplimiento de sus obligaciones. Con Nigeria opera ya un acuerdo de este tipo, y ahora se ha de intentar con Ghana y Mali, pues se ha venido observando un aumento del contingente de personas que intentan acceder a España con origen ghanés o malí. Una consulta al directorio de embajadas españolas en el extranjero confirma que en Accra, capital de Ghana, el Estado tiene embajada, pero no así en Bamako, capital de Mali.