Pasteles con pan de oro para simbolizar la copa del mundo. Los jugadores de la Selección asistieron a un espectacular catering en la fiesta de los campeones
La gran celebración que tuvo lugar el lunes por las calles de Madrid continuó en la explanada Puente del Rey con un catering a cargo de la empresa Mallorca Catering. La Infanta Elena y otras personas cercanas al entorno de la selección estuvieron allí.
Según ha podido saber El Confidencial Digital el único postre especial que aludía al Mundial era un pastel- de crema o chocolate- con virutas de pan de oro. La empresa empezó a elaborar el pasado viernes el menú del catering. En la carta destacaba también un cóctel frío y caliente, con productos propios del servicio como: vasitos con Royal de Foie; chupitos de gazpacho con frutas de temporada y brochetas de frutas compuestas por piña, kiwi y fresa.
Mallorca Catering ha explicado a ECD que el consumo de bebidas fue lo más solicitado -sobre todo de agua- para paliar la intensa ola de calor que azotó Madrid la tarde del pasado lunes. Sin embargo, los jugadores brindaron con cerveza Cruzcampo, distribuida por el sponsor del equipo; a pesar de que los organizadores del cóctel servían también agua, refrescos y brut.
Los integrantes de La Roja no probaron el menú, ya que nada más llegar a la explanada subieron al escenario para agradecer y cantar a los aficionados. Momentos antes, actuaron Amaia Montero, David Bisbal, David Bustamante y Manolo Escobar. El veterano cantante entonó el ‘Y viva España’ como ya hizo en la celebración de la Eurocopa en 2008 en la plaza de Colón.
Al ‘piscolabis’ servido desde las cuatro de la tarde hasta la medianoche asistieron unas 500 personas, entre las que destacaban la Infanta Elena, familiares y amigos de la selección, representantes de los sponsors y personalidades como Nacho Cano. La mayor de las hijas del Rey- ataviada de rojo y gualda- forma parte de la clientela habitual de Mallorca Catering.
La casa organizadora del convite acostumbra a cubrir eventos de esta magnitud, como el Open de golf de España o la final de la Copa Davis en Barcelona, donde sirvieron un ágape para más de 3.500 personas.
