La UE creará un marco legal, en materia de divorcio, aplicable en los casos de parejas de distintas nacionalidades
Según publica el diario alemán, Deutsche Welle, el aumento de la libertad de movimientos dentro de Europa ha convertido a los matrimonios entre personas de diferentes países en una situación cada vez más común. Cada año, más de 170.000 parejas internacionales entran en proceso de divorcio en la UE, lo que representa el 16% de las separaciones de toda Europa. Estas parejas se enfrentan a dificultades legales causadas por la inexistencia de una legislación familiar para el conjunto de la Unión.
En Irlanda, por ejemplo, los casados deben llevar cuatro años sin compartir el mismo techo antes de poder solicitar la separación legal. En Finlandia el divorcio se obtiene en un periodo de seis meses. Cuando los matrimonios los componen personas de nacionalidad diferente, cada una de un Estado miembro distinto y en muchos casos ciudadanos de otro tercer país europeo, se entra en un vacío legal en el que no se sabe qué normativa aplicar. Con la intención de reducir la confusión, la Comisión Europea ha adoptado dos iniciativas: crear un marco legal aplicable a cuestiones relacionadas con el divorcio de parejas de distinta nacionalidad y realizar una consulta pública para poner en marcha una ley que haga referencia a la jurisdicción y a los derechos de propiedad de parejas casadas y no casadas dentro de la UE. El comisario europeo de Justicia, Libertades y Seguridad, Franco Frattini, ha declarado que con estas iniciativas se reforzarán las garantías legales y aumentará la tranquilidad de saber qué ley será aplicada al régimen matrimonial o de divorcio.
