Javier Fumero

Que te vote Jorge Javier

Jorge Javier Vázquez durante la emisión de 'Sálvame', en Telecinco.
Jorge Javier Vázquez durante la emisión de 'Sálvame Naranja', en Telecinco

Jorge Javier Vázquez lleva unos días bastante nervioso. Lo ha reconocido públicamente. Resulta que a su jefe, mentor y responsable del sueldo que cobra cada mes le han dicho que hasta aquí: Paolo Vasile se marcha definitivamente a Roma y abandona Mediaset a final de año.

Eso significa, y Jorgeja lo sabe, el fin de un modo de entender la televisión. Básicamente, la ausencia de principios éticos y morales y la aplicación del pragmatismo más estricto: "¿Vende? Adelante. Es el dinero, ¡estúpido!".

Parece que Pier Silvio Berlusconi, que quiere competir ahora a nivel mundial con Netflix, HBO y Disney+, no le convence esa deriva, además de haber constatado que en España ese modelo está agotado, exánime y tiritando. Se trata de cambiar de planteamiento y transitar hacia una televisión más influyente, prestigiosa, digna y fiable, con unos contenidos acordes.

Vasile se desplaza a España de lunes a viernes y deja a su familia en Italia para que no acabe salpicada por el ventilador de detritus que ha creado. Entiende que su misión es, única y exclusivamente, la cuenta de resultados. No tiene vocación –ha insistido repetidas veces- ni de redentor de la sociedad, ni de moralista.

Le da al pueblo español lo que sus instintos le llevan a consumir compulsivamente: vísceras, chismes, carnaza, cotilleos, celos, disputas, riñas, amoríos, traiciones, morbo, desvergüenza… Si eso quieren, eso les da. Ni más ni menos. Todo es lícito con tal de obtener mayores beneficios al final del ejercicio fiscal, único baremo para distinguir el éxito del fracaso en el imaginario de don Paolo.

Pensándolo bien, Jorge Javier Vázquez no debe ponerse nervioso. Tiene todavía alguna salida profesional: buscar acomodo… en el Gobierno de Pedro Sánchez. De hecho, ya se han declarado públicamente admiración mutua.

Pues ahí tiene el presentador de Telecinco a otro pragmático con pocos escrúpulos, sin líneas rojas ni limitaciones, si de mantenerse en La Moncloa se trata. Todo está permitido con tal de asegurarse un puñado de meses más al frente del Boletín Oficial del Estado.

Alguien repetía semanas atrás aquello de “Que te vote Chapote”. Hoy podemos inaugurar otro pantano: “Que te vote Jorge Javier Vázquez”.

Más en twitter: @javierfumero

 
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