José Apezarena

El tiro por la culata

La maniobra del PSOE buscando animar deslealtades y traiciones en el PP, a propósito de la reforma de la ley de aborto, por el sistema de forzar en el Congreso una votación en urna y por tanto secreta, ha resultado un fallido.

Más aún, se ha convertido en un fracaso propio y en una victoria del rival, que, a la vista de los resultados, ha salido reconfortado y fortalecido tras comprobar cómo todos los diputados populares cerraban filas.

A los socialistas les ha salido por la culata un tiro que, de entrada, más bien parece diseñado y disparado por unos novatos, políticamente hablando.

Se trata de una maniobra impropia de la veteranía que se le supone a Alfredo Pérez Rubalcaba, porque es casi de manual saber que la inducción a la traición, en los rivales, suele provocar precisamente la reacción contraria.

Lo que sí queda claro es que el PSOE cree haber encontrado en la aborto, es decir, en la oposición a cualquier reforma por parte del PP, el quicio de la ofensiva política con vistas a las elecciones europeas.

Elena Valenciano va a convertir la cuestión en el núcleo de sus mensajes, en la creencia de que con eso rebañará votos de toda la izquierda, movilizada absolutamente contra la ley de Gallardón y que se alinearía con el PSOE al comprobar su determinación.

Estrategia igualmente discutible. Porque no es fácil que los reductos de izquierda ajenos renuncien a sus propias vías anti aborto para entregarse en los brazos del socialismo, delegando en ellos tamaño combate.

Así que, en mi opinión, no van a ganar muchos votos haciendo pivotar su propuesta electoral sobre el aborto, y, por el contrario, a lo mejor incluso pierden algunos.

Sería otro tiro por la culata.

 
Comentarios