El Ejército de Tierra, obligado a retrasar la modernización de los misiles Patriot por los recortes de fondos
El Mando de Artillería Antiaérea está preparando un plan de contingencia para alargar el ciclo de vida previsto de las baterías
La crisis del coronavirus ha obligado al Gobierno de España a volcar recursos públicos en Sanidad, en protección social (como los ERTE) y en adquirir material de protección, lo que ha obligado a recortar partidas de otras áreas, como los ministerios de Defensa e Interior.
Esto, que mandos militares advirtieron que iba a ocurrir y que el Ministerio de Hacienda admite en documentos de ejecución presupuestaria que ya está pasando, se está plasmando en consecuencias concretas para las Fuerzas Armadas.
“Limitaciones de presupuesto”
El Arma de Artillería del Ejército de Tierra celebró el pasado 4 de diciembre el día de su patrona, Santa Bárbara. Las medidas contra la epidemia de coronavirus impidió celebrar actos presenciales, pero el Ejército de Tierra difundió en su web un “Discurso institucional sobre la situación de la Artillería”, en el que el coronel director de la Academia de Artillería (ubicada en Segovia) hizo balance de las unidades artilleras.
En el discurso, el coronel Alejandro Serrano Martínez señala cómo afectan los recortes a los artilleros. Relata ciertos avances y programas de compra, como los 100 misiles Mistral que se van a adquirir en Francia, o la despedida del sistema Aspide.
A continuación da las malas noticias: “Debido a las limitaciones de presupuesto, y por encontrarse en una baja prioridad dentro de las necesidades el Ejército de Tierra, no hay perspectivas de disponer en los plazos previstos de fondos para la modernización de los sistemas Patriot, Nasams o del puesto de tiro Mistral, ni para la adquisición de un sistema de altas prestaciones”.
Vídeo del día
Detenida en Madrid una kamikaze borracha y
con un kilo de cocaína en el maletero
Los Patriot de Turquía
Entre los años 2015 y 2018 unidades como el Regimiento de Artillería Antiaérea nº 81 con base en Marines (Valencia) y el Regimiento de Artillería Antiaérea nº 73 de Cartagena (Murcia) fueron incorporaron los sistemas de misiles Patriot.
Se trata de lanzadores de misiles superficie-aire, fabricados por Raytheon y Lockheed Martin en Estados Unidos, que utiliza misiles guiados que simultáneamente enganchan y destruyen múltiples objetivos bajo un ambiente de contramedidas electrónicas, con un alcance de entre 80 y 100 kilómetros.
El Ejército de Tierra tiene desplegada una de estas baterías en Turquía, en la misión de la OTAN para proteger a este socio de la alianza de las amenazas que pudieran llegar por el aire desde Siria, a causa de la guerra civil que estalló hace años en ese país.
Además, claro está, las baterías de misiles Patriot de los regimientos del Mando de Artillería Antiaérea se ubican en lugares estratégicos del territorio español para proporcionar defensa antiaérea.
El coronel director de la Academia de Artillería admite que no hay fondos para modernizar los sistemas Patriot, y tampoco los Nasams. El sistema de misil antiaéreo avanzado (NASAMS) es un sistema de defensa antiaérea a media altura (10 kilómetros como máximo), con un alcance efectivo de entre 7 y 10 kilómetros en torno al objetivo a proteger e integrado por misiles AMRAAM y un radar Sentinel.
El recorte de fondos también afectará a la modernización del puesto de tiro de los Mistral, un sistema de artillería antiaérea para la defensa a baja y muy baja cota (techo de 3 kilómetros) de unidades de maniobra, con un alcance de hasta 6 kilómetros.
Plan para alargar su vida útil
Si no hay dinero para acometer las modernizaciones previstas, ¿qué hará el Ejército de Tierra con los Patriot? El director de la Academia de Artillería explica que el Mando de Artillería Antiaérea “está elaborando un plan de contingencia para el sostenimiento de la disponibilidad operativa de los materiales actuales más allá del ciclo de vida inicialmente previsto, con el horizonte 2030”.
Como ha pasado ya mucho tiempo desde que se elaboraron los planes de modernización y adquisiciones, se ha acometido su revisión para adaptarlos a la situación actual.
El coronel Serrano adelanta que “entre otras ideas, se valora la posibilidad de modernizar el sistema Hawk, la adquisición de una plataforma dual misil-cañón para el acompañamiento a unidades de combate, y el impulso a la antes mencionada modernización del COAS”.