El plan de ahorro de ZP

Quizás no hubiera hecho falta recortar el sueldo a los funcionarios si en los años anteriores no hubieran dejado ingresar, como ha hecho ZP, a miles y miles de personas al empleo público (lo que como se avisó era insostenible).Quizás tampoco hubiera hecho falta congelar las pensiones si este gobierno de reacción tardía sin timón ni timonel no hubiera despilfarrado el dinero por ejemplo en el envío de preservativos a África, en las embajadas de las comunidades Autónomas, en los absurdos ministerios que tiene (Igualdad, Vivienda...), en los mapas de Bibiana Aído, en la medida electoralista de los 400 euros y en múltiples cosas más...

Quizás ese ahorro, no lo sea tanto, si no se recortan, como apuntó acertadamente Rajoy, las subvenciones a partidos políticos y sindicatos; si se sigue (y esto ya lo añado yo) con el plan de crear un Senado multilingüe que nos costará más de 100.000 Euros a todos los españoles, si sigue adelante con la ley del aborto cuya implantación nos costará otros tantos miles de euros, si sigue organizando (como en alguna Comunidad Autónoma ha pasado) dinero para organizar un taller sexual donde los niños y niñas aprendan a disfrutar con su propio cuerpo, en fin, si sigue con toda una política de despilfarro mastodóntico.

Cuando se llega a los niveles en los que estamos hoy en día: casi el 12% de déficit y 20% de paro; cuando precisamente el campeón del despilfarro es el que ahora impone un plan de austeridad (acertado sí, pero tarde y mal) para tratar de eliminar el monstruo que él mismo ha creado, cuando todo un presidente de una nación como la española ha tenido que esperar a que vinieran del exterior para alertarle del mal que se nos viene encima, en fin, cuando ese presidente, inutil e incompetente, carga de nuevo contra sus propias víctimas (todos los españoles), significa al fin y al cabo, que ese presidente ha de dimitir, sino por honradez, que lo dudo, al menos por cortesía o talante.