Artcurial, una casa de subastas francesa para hacer frente a la “invasión” anglosajona

Artcurial ocupa un bello edificio en el Rond Point de los Campos Elíseos. En su origen era una librería-galería especializada en las ediciones de arte, hasta que en 2001 se convirtió en una casa de subastas. Algunos de los nombres más conocidos de las ventas de arte en Francia decidieron unir sus fuerzas para hacer frente a la “invasión” angosajona, que acababa de desembarcar en Francia bajo los prestigiosos nombres de Christie’s y Sotheby’s.   Para poner al alcance de la mano el mundo de las subastas, y lograr familiarizar a un amplio público, decidieron transformar el Hotel Dassault, que así se llama el palacete en honor de su propietario, en un lugar único, o al menos especial.   Por un lado están las exposiciones de los objetos que serán vendidos unos días más tarde. A dos ventas por semana, son muchos las cosas que se pueden contemplar, y muy variadas. En 2003, por ejemplo, la colección Perrot Moore contaba con 410 obras de Salvador Dalí.   Aunque aseguran que la subasta está al alcance de todos, es un decir. Porque las ventas más sencillas comienzan a partir de 80 euros. Pero para los que no se lo puedan permitir como un hobby, siempre queda la posibilidad de acudir al menos una vez en la vida, como a la Meca. Además, existen ocasiones en las que acudir a una subasta puede ser ocasión de conocer una bella historia. Como el año pasado, cuando la protagonista de El Beso del Hotel de Ville, la verdadera, acudió para presenciar la venta del original de esa fotografía que sigue dando la vuelta al mundo y que se ha convertido en un icono del amor apasionado y París. Fue la oportunidad de conocer el origen de aquella imagen, por la que en abril del año pasado alguien ofreció 185.000 euros.   Luego está la librería, de conocida reputación entre los amantes del arte. Con más de 10.000 obras en las que están representadas todas las artes creativas, y lo que es más valorado, un buen número de catálogos y obras agotadas.   La última novedad es el restaurante que, dicen, es un remanso de paz insertado en el bullicio de los Campos Elíseos.