Los precedentes improcedentes

El ya se ha hecho; el ocurre en otros sitios; el si fulanito lo hace o el a zutanito se le consiente, son habituales en ciertos ambientes. Recurrir al precedente no deja de tener su punto de infantilismo, pero es que nuestros hombres públicos, en su mayoría, no brillan por su madurez de adultos políticos.

Nuestra vida política y la vida de nuestros políticos, están llenas de precedentes. Es una especie de jurisprudencia callejera a la que se agarran en sus alegatos, en sus pactos y hasta en sus desavenencias.

Tenemos el precedente Forcadell, el precedente Puigdemont, el precedente del Gobierno de Andalucía, el precedente del cupo vasco, el precedente de las camisetas y las impresoras y las esposas en el Congreso, y hasta el precedente del gol de Messi que no subió al marcador de Mestalla. Y eso, sin contar con el precedente de las lesiones de Bale, que más que un precedente es una pesadilla.

El precedente justifica, y quien lo esgrime, pretende añadir el precedente a sus razonamientos aunque el precedente no siempre sea razonable.

Así, Oriol Junqueras aduce el precedente Forcadell para salir de la cárcel. Rivera saca a relucir la coalición en Andalucía para quejarse de que Miquel Iceta dé la espalda a Arrimadas. Los extremeños – no solamente ellos- con toda razón, ponen sobre el tapete de la protesta, el precedente del cupo vasco. Puigdemont, que ahora se dedica a la ópera, se recrea en el precedente del holandés errante. Los del V.A.R se basan en el precedente del gol de Messi en vez de percatarse de lo malos que son los árbitros. Hasta Meghan Markle tiene su precedente en Begoña Villacís.

Y así, de precedente en precedente, vamos tirando, copiándonos los unos a los otros. Pero los precedentes no son buenos como argumentos sólidos y hasta son difíciles de catalogar.

Por ejemplo: ¿las memeces de Rufián tienen su precedente en las memeces de Tardá, o las memeces de Tardá tienen su precedente en las memeces de Rufián?

Porque, ¿quién negaría que Luís Roldan puede ser el precedente del errante y huidizo Puigdemont?

 
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