La tramontana da una tregua en el incendio del Empordà, que ya ha quemado 573 hectáreas

Los municipios de Portbou, Colera y tres urbanizaciones de Llançà permanecen confinados. Cortes de luz, agua y teléfono.

Portbou (Girona) ha amanecido este sábado por la mañana sin luz, agua, internet ni teléfono. 

El fuerte viento que soplaba en la zona impedía controlar el fuego a los más de 300 bomberos que trabajan sobre el terreno. El incendio, declarado la tarde del viernes en Colera, sigue sin control y ha quemado ya 573 hectáreas (387 en el municipio de Colera y 185 en Portbou).

La tramontana ha dado una tregua desde el mediodía y ha permitido activar dos Aviones de Vigilancia y Ataque (AVA) han podido despegar, aunque las condiciones no han permitido empezar a lanzar agua sobre las llamas, por lo que los trabajos de extinción siguen centrados sobre cinco helicópteros que operan de forma casi quirúrgica y unas cien dotaciones de Bomberos con 300 efectivos, apoyados por otras 10 con apagafuegos franceses que han cruzado la frontera para dar su apoyo.

Sigue preocupando especialmente el flanco derecho del fuego, por dos riesgos: uno, que avance hacia la localidad de Llancà, y otro porque su extensión permitiría crecer por una zona más amplia del Empordà.

Los municipios de Portbou, Colera y tres urbanizaciones de Llançà permanecen confinados.

Un total de 140 personas han pasado la noche en el pabellón de Llançà y 120 en el centro cívico de Colera. “Es un incendio muy complejo”, ha declarado el jefe de bomberos de Girona, Jordi Martín, preocupado esta mañana por las rachas de viento que empujaba la tramontana. 

Esa preocupación se ha reducido en las últimas horas, ya que las rachas han pasado de velocidades de 100 kilómetros por hora a los actuales 30, que volverán a aumentar en cuanto avance la noche. “Tenemos unas horas por delante en las que intentaremos no aumentar las dotaciones terrestres, porque el dispositivo es suficientemente bueno para hacerle frente, pero intentaremos incorporar más medios aéreos, porque las avionetas con las condiciones de viento que hemos tenido no han podido trabajar en condiciones”, ha señalado Martín.

La puesta en marcha de los aviones ha sido recibido por el consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, como una “buena noticia” porque “puede ayudar al objetivo de hoy que es anclar el flanco derecho, que es el más importante porque de escaparse se podría ampliar mucho el perímetro y el potencial del incendio. Los AVA diagnosticarán la situación y se decidirán si empiezan a operar los aviones FOCA del Ministerio, que están advertidos y en alerta.

Sobre el origen del fuego, “se descarta que sea por causa natural”, ha dicho el consejero, aunque se sigue investigando. Los agentes rurales tienen perimetrada el área de inicio del fuego, en la zona del Pedregal, cerca del pantano de Portbou, donde habría algunas barracas y una se habría visto afectada por las llamas.

De hecho, se prevé que este sábado soplen rachas de viento de 100 kilómetros por hora en la zona, lo que podría dificultar las tareas de control del incendio, aunque la previsión es que estas bajen de intensidad en las horas centrales del día, según informa en redes sociales el Servicio Metereológico de Cataluña.

Por ese motivo, los aviones de ala fija no pueden actuar pero sí dos helicópteros de la Generalitat, muy centrados por su capacidad en actuaciones quirúrgicas. Está previsto que en breve se amplíen nuevas unidades a los trabajos, pero es necesario que las rachas de viento se reduzcan hasta los 60 kilómetros por hora para que los aviones se puedan sumar a las tareas de extinción, que por el momento la Generalitat tilda de “precarias” por la limitación meteorológica existente.

En cuanto a la afectación viaria, el incendio ha obligado a cortar la carretera N-260, así como la circulación de trenes de la RG1 entre Figueres y Portbou.

El viernes por la tarde se vivieron momentos de angustia en algunos lugares. Josep Sancho, un residente en Girona que veranea en Colera, vio con impotencia durante toda la tarde cómo avanzaba la columna de humo primero y después las llamas hacia el municipio y más tarde hacia su casa.

El cuerpo de Agentes Rurales llevó a cabo el viernes una llamada a extremar las precauciones e informó que este sábado el nivel 3 del Plan Alfa estará activado en 42 municipios de siete comarcas. Se restringirán los accesos a cuatro espacios naturales protegidos: els Ports, Cardó-Boix, Tivissa-Vandellós y Cap de Creus. 

La decisión de restringir los accesos a los parques naturales responde a la necesidad de reducir el riesgo de que se inicie un incendio debido a la acción del hombre y para evitar que haya personas vulnerables en la zona en caso de que haya un fuego.

Además, en los municipios con el nivel 3 del Plan Alfa también se han suspendido un total de 1.792 actividades de riesgo de incendio, entre ellas las relacionadas con el uso de radiales, actividades de apicultura o forestales.

Los agentes rurales ya tienen delimitada el área de inicio del incendio en la zona cercana al Pantano de Portbou. Están investigando las causas del incendio, pero descartan en principio que tenga que ver con un fenómeno natural o línea eléctrica.

A causa del incendio, una línea de media tensión perteneciente a Endesa ha quedado maltrecha y ha dejado a 4.000 personas de Portbou, Colera y Llançà sin luz.

Esa avería, en cuya reparación la compañía intenta trabajar, aunque es complicado hacerlo con el incendio, tiene una derivada: ha dejado sin energía a la planta de ósmosis que estos días ofrece el agua al millar de habitantes de Portbou, que no pueden suministrarse del pantano habitual porque este, afectado por la sequía, tiene niveles muy bajos de agua y está afectado por una bacteria. Camiones cuba están suministrando al municipio.

Comentarios